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Borg necesitó tres horas para vencer a Gerulaitis

Juan Cruz

Connors y Borg jugarán mañana la final masculina del torneo de Wimbledon, como se esperaba, aunque para ninguno de los dos cabezas de serie fue fácil.Connors le ganó 6-3, 6-3, 4-6 y 6-4 a su compatriota el americano Mac Enroe, el primer junior que llega a los dieciocho años a una semifinal de este torneo británico. Connors tuvo contra sí al público, que apoyó a Mac Enroe, un zurdo inexperto que de todos modos jugó con gran fuerza y con un óptimo servicio. Estuvo a punto de darle la vuelta al partido y de dar la gran sorpresa del torneo, como si ya no hubiera dado suficientes. Su entusiasmo, sin embargo, fue contrarrestado por sus propias dobles faltas; la más grave de todas se produjo en el último set. Sus defectos comenzaron cuando se creció, en el tercer set, y su ambición comenzó a perderle.

El sueco Borg, que ganó al americano Gerulaitis, mostró de nuevo su gran capacidad para controlar iodos los servicios, aunque la dureza y la resistencia de Gerulaitis, así como la excelente volea del americano, hicieron que esta confrontación, que duró más de tres horas, fuera una de las más emocionantes de Wimbledon, y en sí misma constituyó lo que los espectadores consideraron como la final ideal del torneo. El dominio de Borg, que ganó 6-4, 3-6, 6-3, 3-6 y 8-6-, fue de todos modos la expresión de la diferencia que existe entre los cabezas de serie dos y ocho del ranking de Wimbledon, aunque, en esta ocasión, en algunos momentos los términos parecieron invertidos.

Hoy se jugará la final femenina, entre Virginia Wade, de Gran Bretaña, y Betty Stove, de Holanda, y es posible también que se jueguen hoy las semifinales de dobles masculinos y femeninos.

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