Bonn y París tratan de armonizar su política frente a la Unión Soviética
La posición de Francia y de la República Federal de Alemania respecto del ingreso de España en la Comunidad Europea, tras las elecciones generales españolas, es uno de los temas clave que han tratado en Bonn el presidente Giscard y el canciller Schmidt.La visita de Brejnev a París, el próximo lunes, ha sido también un punto fundamental en estas conversaciones, que se han prolongado por el espacio de dos días en la capital federal. Tanto Giscard como Schmidt desean que la nueva etapa que inicia la URSS, a partir de las reformas constitucionales y de la designación de Brejnev como presidente de la Unión Soviética, incluya también una línea diplomática más conjuntada por parte de Bonn y París.
En el mismo sentido, los dos políticos han analizado las posibilidades de una promoción acorde de la energía nuclear en la Europa integrada y la preparación para las primera elecciones europeas directas del próximo año. Otros objetivos comunes que, según la perspectiva de ambos políticos, podrán contribuir a una mayor aproximación entre los dos países, Francia y RFA, son la lucha contra al paro y la estabilidad de los precios. A pesar de que aún no se cumplía el plazo normal para la celebración de este encuentro, fjado en principio para dentro de seis meses, la urgencia con que se ha dispuesto lleva a pensar a los comentaristas alemanes que Giscard y Schmidt, agitados por problemas similares dentro, de sus, respectivas formaciones políticas, quieren encontrar lo antes posible soluciones políticas y económicas que contribuyan a mantenerlos en sus puestos.
Entre los proyectos conjuntos que Francia desea promocionar como signo de prestigio y al tiempo como fuente de ingresos, es el del avión comercial Airbus. Giscard es partidario de una ampliación del grupo de países constructores hasta ahora integrado por Alemania, Francia, Holanda y España- con el fin de intensificar la producción y agilizar la comercialización de los aviones aún no vendidos.
El presidente francés ha estado acompañado por el jefe de su Gobierno y por el ministro de Asuntos Exteriores durante sus conversaciones con el canciller Schinidt, con el ministro de Asuntos Exteriores alemán y con el de Economía.
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