Niño muerto a estacazos en un pueblo sevillano

El cadáver de un niño de once años de edad ha sido encontrado en una acequia cercana a la localidad sevillana de Villafranco del Guadalquivir, a la que había sido arrojado tras ser brutalmente agredido con una estaca. Se trata de Manuel Gallardo, de once años, cuarto hijo de los seis que tenía el matrimonio formado por Cristóbal Gallardo, jornalero del campo en paro, y María de las Mercedes Ferrera, vecinos de la citada localidad.

Como presunto autor del crimen, las fuerzas de la Guardia Civil de Villafranco han procedido a la detención de Vicente Sosa, de veintisiete años de edad, también vecino de la misma población y que al parecer, tiene inclinaciones homosexuales, y no opuso resistencia a la Benemérita.

En una primera reconstrucción de los hechos, no oficial aún, parece que la familia del niño notó su falta sobre las once de la noche, por lo que decidió buscarlo. Pudo saber así que se le había visto poco antes en las cercanías del cine de la localidad, del que es propietario el señor Sosa o su familia, y afirmaba Manuel Gallardo que a esa hora se disponía a marchar a su casa.

Se supone que cuando intentaba hacerlo le salió al paso Vicente Sosa, que habría pretendido que el niño accediera a sus peticiones y, al negarse éste y amenazarle con decirlo a sus padres (ya se habían dado, al parecer, otros casos con niños de la localidad), Vicente desgajara una penca de una palmera, con la que golpeó salvajemente la cabeza del niño.

El detenido ha sido puesto a disposición del juzgado de guardia de Sevilla, el número 5 de los de instrucción que ha ordenado su ingreso en la prisión provincial.