Se impone la revisión del sistema de seguridad bancaria

Las estadísticas delictivas en cuantoaÍ días y números de atracos no se hancumplido totalmente esta semana,al menos en lo que se refiere a los realizados contra entidades bancarias y similares. Y sin embargo, el número de asaltos realizados en los últimos cinco días ha-superado la media usual, al contabilizarse nada menos que cinco atracos en Madrid y -su provincia. El botín obtenido ha alcanzado la cantidad de siete millones-de pesetas, cifra que podía haber ascendido a más de veinte si los delincuentes hubieran estudiado más sus golpes

Minutos después de las 9.30, tres personas, al parécer, jóvenes, realizaron el último de los atracos contabilizados esta semana. El lugar elegido esta vez comofuente de , ingresos fue una sucursal pequena de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Madrid-, la número 86, situada en la calle Ezcquiel Solana, 92. Una entidad que por su tamaño no suele tener, como así puedieron constatar los atracadores, ni vigilantejurado ni cámara filmadora.El relato de este quinto atraco es como los anteriores. Tres jóvenes, vestidos con gabardinas blancas, se apearon de un Seat 1430, de color blanco, armados con pistolas y con la cara cubierta con un pasamon-: tañas. Uno de ellos, como ocurrió el pasado miércoles en el Banco General de la Industria y el Comercio, penetró primero para «dejar preparado el terreno». Tras intimidar a los seis empleados y a los cuatro clientes que se encontraban en ese momento en el local, les dijo: «Vuélvanse, las manos quietas, contra la pared. Es un atraco». Después, y cuando ninguno de los presentes podía ver lo que pasaba, otros dos jóvenes, también armados con pistolas cortas, posiblemente de calibre nueve, se apoderareín de cerca de dos rnillones entre el dinero encontrado en la caja semiabierta y el de la ventanilla del cajero.Versiones de los testigos«Creo que metieron el dinero en una bolsa de plástico. No puedo asegurar nada, ya que apenas pude verles. ».

«No, no eran suramericanos. Al menos, el que entró primero y nos amenazó hablaba un correcto castellano.» «Duró uno o dos minutos, fue muy rápido. »

Esta vez el delito tuvo un espectador en la persona de Mariano Rollón, empleado del taller de mecánica Cristóbal, situado en la acera de enfrente. Según manifestó a la prensa además de los tres que entraron, otros dos, un hombre y una-mujer, se quedaron en el automóvil, cuya matrícula podría ser de Madrid, serie 0-7206.

El número, coincidente con el de personas que atracaron el pasado jueves en la Administración del ambulatorio central del Instituto Nacional de Previsión, hace pensar en medios policiales sobre la*posibilidad de que se trate de la

misma banda.El martes, único día sin atracoHace dos semanas, EL PAIS publicó un estudio realizado por la revista de la Opinión Pública, en el que se'examinaban las cifras y características obtenidas a lo largo del trienio 1972, 73 y 74. Según las citadas estadísticas el viernes y el martes eran los días en que se habían realizado más atracos.

Sin embargo, esta semana, por una curiosa casualidad, el martes no podrá contabilizarse como díaelegido por los atracadores, ya que ha sido el único día en que los servicios policiales no tuvieron que cubrir ningún asalto en entidad bancaria.Este descanso ;ería cobrado, al día siguiente, con dos atracos en el citado Banco General de Industria y Comercio, y en una joyería de Alcorcón, en donde los atracadores obtendrían medio millón y tres millones de pesetas respectivamente en dinero 3,joyas.En ambos casos, tres jóvenesfueron los protagonistas de estos

asaltos cada día más frecuentes.

Armados con Í pistolas y con el co

rrelpondiente Seat, marca, al pa

recer, preferida por los asaltantes,

los jóvenes intimidaron a emplea

dos y clientes que pudieron descri

bir después sus características.No ocurrió lomismo con el director y el portero de Simago, a quienes cuatro jóvenes amenazaron el lunes antes de llevarse las 300.000 pesetas recaudadas durante el día. A la hora de declarar ante la Policía, sólo pudieron decir que eran jóvenes y llevaban el rostro cubierto.Falta de personal y medios de seguridad '-En el año 1975 comenzaron a incorporarse al sistema bancario diversas medidas, alarmas luminosas, sonoras, cámaras filmadoras. cristales blindados y otros medios anti-robos. El número de atracos disminuyó de cien a 63.Desde entonces los atracadores asaltan en la mayoría de los casos, sucursales mal provistas de estos medios. Por lo general son cadenas bancarias con numerosas sucursales las más afectadas. El botín no suele pasar de los dos millones, pero a,cambio pueden trabajar con tranquilidad. Esto se evitaría si los bancos, entidades económicas y joyerías fueran obligadas a instalar medios de seguridad apropiados que no sólo evitarían sustraciones de dinero o alhajas, sino lo más importante: vidas humanas.