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La Ciudad Sanitaria "La Paz", saturada de enfermos

Durante los últimos meses las condiciones sanitarias de la Ciudad Sanitaria La Paz no pueden desarrollarse con normalidad ante el incremento exorbitante de enfermos que, trasladados de otras clínicas sanitarias u hospitales, son ingresados diariamente en las distintas plantas.

Esta situación se agravó en la última semana cuando las plantas once, doce y trece, pertenecientes a las especialidades de aparato digestivo, aparato respiratorio y endocrino sufrieron un incremento excesivo, según el personal médico que se vio en la obligación de habilitar pasillos, despachos y dormitorios para poder atender a un número de enfermos que llegó casi al doble del máximo establecido.«Llevamos mucho tiempo en este estado. Hay un problema tremendo por parte de admisión ya que ante la demanda existente no se puede dejar a los enfermos en la calle. Sin embargo, y a pesar de que sólo entran los que verdaderamente necesitan asistencia, los pasillos ofrecen un aspecto denigrante», manifestaron a EL PAIS miembros del personal médico del hospital.

Según las versiones obtenidas, el problema no ha surgido como se dijo en un principio por una epidemia de gripe «sino de que La Paz se ha convertido en el centro receptor de todos los que vienen de provincias, de los que no pueden atender en otros hospitales y de todos los que necesitan qué se les trate en una especialidad concreta». «La Ciudad Sanitaria se ha quedado pequeña; cuando tenemos que lavar a un enfermo en un pasillo, con el consiguiente malestar para él, tenían que estar las autoridades sanitarias para verlo.» «La situación ha llegado a que muchas veces tenemos que hacer esperar a un enfermo en el hall en tanto buscamos a otro que, por sus condiciones, pueda recibir el alta. »

Según el personal consultado el problema que está generalizado se convierte en caótico cuando se da permiso a los familiares para que visiten a los enfermos. En los dormitorios que están preparados para tres personas hay cuatro por lo general; uno de ellos con sus cosas en cualquier sitio, ya que no hay ni armarios. Enfermos con válvulas de oxígeno se mezclan con visitas, biombos y no se puede pasar ni por los pasillos.

En una de las plantas citadas, la once, de la residencia general ha llegado a haber setenta enfermos cuando la capacidad del departamento de aparato digestivo es únicamente para 44 personas. «Parece que en los últimos días ha decrecido algo el número de admisiones. Ayer había nada más que 64 enfermos.»

La situación ha sido denunciada por médicos y enfermeras en repetidas ocasiones a la dirección del centro. Sin embargo el estado de los enfermos que acuden y la imposibilidad de enviarles a otros centros, por el momento inexistentes, impide que el problema desaparezca.

Nota de los médicos

Durante la tarde del martes una comisión de médicos y personal no sanitario del departamento de medicina interna de la Ciudad Sanitaria se reunió en asamblea para estudiar la insuficiencia crítica de camas.Según una nota elaborada tras la reunión, la mayoría de los ingresados está muy grave y las reanimaciones son insuficientes. A esto habría que añadir que las condiciones de habitabilidad son deficientes, al no haber duchas ni baños utilizables. A 120 se eleva el número de urgencias diarias, cantidad calificada como discriminatoria con el resto de los hospitales. Esta cantidad de ingresados crea, según la nota, que el personal no se sienta responsable y que a pesar del gran esfuerzo por su parte, se esté llegando a «actitudes asistenciales que en circunstancias normales pudieran ser consideradas antideontológicas».

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