Los liberales españoles se entre el colectivismo y el conservadurismo
La Convención Liberal Europea se celebró ayer en Madrid con una serie de discursos de los principales líderes españoles de esta ideología, que se orientaron fundamentalmente a la definición del campo político liberal, entre lo que se denominó genéricamente colectivismo y los conservadores.Ambas fuerzas fueron ampliamente criticadas en las intervenciones, que reivindicaron las banderas que, según se dijo, estas otras ideologías han tratado de arrebatar al liberalismo. El apoyo internacional se vio sensiblemente mermado por la ausencia del ministro alemán de Asuntos Exteriores, Genscher.
La Convención Liberal Europea se celebró a las siete y media de la tarde de ayer en el Palacio de Congresos de Madrid, con la presencia de los principales líderes liberales españoles y de representantes extranjeros, entre ellos, el secretario general de la Internacional Liberal, Richard Moore, y de unas 1.500 personas.Después de un saludo del presidente del Partido Demócrata Popular, Fernando Chueca, y la lectura de una carta de adhesión de la representante del Grupo para la Implimentación de los convenios de Helsinki,: en la URSS, inició los discursos Joaquín Satrústegui, presidente de Alianza Liberal, quien afirmó que el conjunto de los españoles está a favor de una sociedad de tipo liberal europeo, contraria al colectivismo, que convierte al Pueblo en funcionarios.
Criticó también a los eurofranquistas de Alianza Popular, que ahora se presentan -según dijo como campeones de la libertad, y añadió que no hay que tenerles miedo. Señaló después el peligro de que se intente controlar la elecciones, dada su trascendencia y abogó por la formación de un partido fuerte, «que establezca alianzas con los otros partidos liberales, porque los demócratacristianos y los socialdemócratas no son más que liberales con otro nombre».
Habló después Richard Moore que fue muy aplaudido, a pesar d que no se tradujo su discurso, y a continuación Ramón Trías Fargas, líder de Esquerra Democrática, quien ahogó por separar el liberalismo de su identificación con el capitalismo del. siglo pasado y rechazó a quienes antes nos llamaban demoliberales y ahora se proclaman más liberales que nadie.
Intervino a continuación el presidente del Partido Liberal Italia no, Giovanni Malagodi, quien aludió a las dificultades para la unidad europea y a los peligros que, en su opinión, corre la libertad en el mundo, frente al burocratismo colectivista y la falta de miras de los conservadores.
El señor García Madariaga defendió el Estado liberal como un aparato neutro e independiente, democrático y defensor de la justicia social.
A continuación, Walter Wilder, representante del Partido Liberal Alemán en la Internacional Liberal, disculpó a su presidente, Hans Dietrich Genscher, y leyó un mensaje del ausente, en el que se afirma la necesidad de una España democrática para Europa y se manifiesta la esperanza del ministro alemán en que España se integre rápidamente en las comunidades europeas.
Enrique Larroque, presidente del Partido Liberal, insistió en la necesidad de combatir a Alianza Popular, a la que identificó con la continuidad y el autoritarismo, y señaló como otras amenazas a los Guerrilleros de Cristo Rey, los grupos de presión franquistas y el Movimiento, cuya disolución pidió.
Se leyó después un mensaje del primer ministro de Canadá, Pierre Trudeau, disculpando su no presencia y propiciando los mejores deseos para el pueblo español.
Cerraron el acto los discursos de Ignacio Camuñas, secretario general el Partido Demócrata Popular, y de Joaquín Garrigues, presidente del Partido Demócrata, que, junto al señor Larroque, fueron los que más calor levantaron entre el auditorio. El señor Camuñas afirmó que los liberales no se conforman con las libertades formales, sino que además propugnan otros derechos, a la educación, al trabajo, al bienestar y añadió, que los es pañoles desean libertad, estabilidad democrática, progreso económico e igualdad social de oportunidades. Por su parte, el señor Garrigues criticó los personalismos y defendió las libertades para todos los partidos y la autonomia para todas las regiones.
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