Es necesario que el partido parezca independiente

«Cuando Carrillo declaró recientemente que la represión de los disidentes demuestra que la Unión Soviética no es una democracia popular, sino una dictadura de una pequeña minoría del país sobre el resto de la sociedad, Berlinguer replicó: «Ese es un juicio sumario, del cual no participo.»El Partido francés, también, tiene todavía entre sus dirigentes obstinados stalinistas. Marchais mismo es un nuevo (y en algunos aspectos dudoso) convertido hacia la doctrina más liberal del eurocomunismo.

(...) En Madrid, Marchais no quiso tener a los rusos en contra. Dijo: «Pensamos que los tres partidos no tienen derecho de hacer una condena colectiva de otros partidos.» Lo que dejó frío a Carrillo.

Al español no le importa lo que Moscú piense, desde que el Kremlin intentó echarlo como jefe del partido. Por razones políticas y personales Carrillo quería una declaración conjunta condenando el trato de los disidentes en el bloque soviético. Una petición para legalizar el Partido Comunista se halla en el Tribunal Supremo y de su decisión depende si el tribunal encuentra o no que el partido está sometido, a una disciplina internacional y se propone establecer un sistema totalitario. La declaración conjunta que pedía Carrillo hubiese reforzado la afirmación que el partido es independiente de Moscú y su compromiso con los principios democráticos.»

9 marzo