La OTAN entra en el horizonte de las reformas militares

El decreto de reorganización del Ministerio del Ejército puede ser publicado en los próximos días, y una ley de la Defensa Nacional puede ser promulgada en un plazo no muy posterior, de acuerdo con informaciones dignas de crédito. Esos serían los próximos pasos de la reforma militar, tan vigorosamente emprendida por el actual Gobierno y conducida por el vicepresidente primero para Asuntos de la Defensa, teniente general Gutiérrez Mellado.

El progreso de la reforma militar hace pasar a primer plano la cuestión de la posible integración de España en la Alianza Atlántica, cuestión puesta a plena luz gracias a la participación de Gutiérrez Mellado en un simposio internacional sobre defensa, celebrado el fin de semana en Munich. La reorganización del Ministerio del Ejército tiene por objeto vigorizar institucionalmente a su Estado Mayor, con vistas a dotarle de todas las facultades que le permitan abordar una reestructuración profunda de la fuerza. El mando de personal y el mando del apoyo logístico pasarían al Estado Mayor. El Ejército mantendría una diferencia respecto a la estructura de la Marina ya que en ésta esos mandos dependen del ministro, y no del jefe del Estado Mayor de la Armada. Es de observar, sin embargo. que el apoyo logístico de una Marina puede tener una autonomía organizativa respecto del mando de la fuerza naval. debido al pequeño numero de centros de apoyo necesario, y a la relativa autonomía, propia de la fuerza naval. No así en el Ejército. donde el despliegue de la fuerza Y el apoyo logístico son dos factores que necesitan absoluta y permanente integración. Así, pues, no se cree que sea necesario una reorganización del Ministerio de Marina, en las mismas líneas. En cuanto al del Aire, éste presenta matices particulares, debido a que de él depende administrativamente la aviación civil.

Pronto seguiría la ley de Defensa Nacional, donde se definirían las interrelaciones entre los organismos militares y civiles, entre el mando militar y el mando político de la nación tanto en paz como en guerra. Escalón importante para llegar a esta ley, fue el decreto-ley de creación de la Junta de Jefes de Estado Mayor, que hacía de presidente de ésta figura clave en la conciliación de criterios entre los ejércitos. Y prácticamente portavoz del mando de las Fuerzas Armadas, en su calidad de jefe del Alto Estado Mayor. Es decir, el Jefe del Alto reuniría no sólo la calidad de asesor del Gobierno. que le da la ley orgánica del Estado, sino representante del mando de la Junta de Jefes de Estado Mayor.

En todo caso se estima que sería imposible pasar la ley de la Defensa Nacional por las actuales Cortes, en vísperas de la campaña electoral, por lo que no se descarta la utilización del procedimiento del decreto-ley.

En cuanto al Ministerio de Defensa, o incluso, un Ministerio de los Ejércitos, se considera que su creación sería el culmen de la reforma funcional de las Fuerzas Armadas, y presentaría problemas de naturaleza política, tales como la conveniencia o no de que lo dirija un civil, lo cual lleva al problema de la existencia de grupos civiles capacitados para cumplir esta importante y delicada tarea.

La conexión OTAN

Nos estamos acercando a los umbrales de la cuestión OTAN. En realidad, todo progreso militar después de que se dilucide la cuestión del Ministerio de Defensa depende de que se despeje la incógnita de la Alianza. La adopcion del objetivo OTAN o su rechazo condicionará la estructura de la fuerza, la postura militar, la asignación de misiones a los distintos ejércitos y el reparto de los recursos existentes. El de la OTAN «es un tema que no se ha tratado todavía», dijo Gutiérrez Mellado en Barcelona, el domingo, al regresar de Munich. Sin embargo, todo el mundo ha leído una fuerte connotación en unas palabras del ministro alermán de Defensa, Leber en presencia del general español. haciendo votos por la ampliación de la Alianza a otros Estados que compartan su espíritu. Si no se ha tratado por lo menos se ha contemplado el tema de la OTAN.

Por el lado español, el avance mayor en el camino de la OTAN ha sido la creación, el pasado día 9, del comité "ad hoc», en el seno del Consejo Hispano-Norteamericano, para la adquisición de la doctrina militar de la OTAN que pueda interesar a los fines del Tratado Hispano-Norteamericano, La tarea más urgente de los miembros españoles del comité es la preparación de expertos en temas OTAN (que en el momento actual no son muy abundantes) para que esos problemas puedan ser analizados por la Adminístración civil y militar. Constituyen ese comité un grupo de tres funcionarios civiles, tres militares españoles. y un pequeño grupo de funcionarios norteamericanos. El comité deberá explorar la estructura y funcionamiento de la OTAN para sugerir al Pleno del Consejo posibles areas de interés para España. Naturalmente esas áreas, deben ser luego negociadas con los organismos poIíticos y militares de la Alianza en Bruselas.

En resumen, la reforma administrativo-militar de las Fuerzas Armadas, más la aparición de la OTAN en la perspectiva de los reformadores hacen ahora urgente la formulacion de doctrinas políticas por parte de los Gobiernos y de los partidos, que permitan llegar añ verdadero objetivo, que es el perfeccionamiento de la fuerza y del poder internacional del Estado.