Hoy, Día Escolar de la No-violencia y la Paz
Hoy, día 30 de enero, aniversario del asesinato de Mahatma Gandhi, se celebra en buen número de escuelas del mundo, el Día Escolar de la No-violencia y la Paz (DENIP), una jornada seglar educativa que propone la dedicación a la reflexión sobre la no-violencia y que tendería a educar de forma pacífica y activa a los niños. «El amor es mejor que el egoísmo, la no-violencia es mejor que la violencia, y la paz es mejor que la guerra», es el lema o mensaje básico que los Amigos del DENIP proponen como base de reflexión.
Llorens Vidal, inspector de EGB, ha dirigido una carta a los educadores en la que propone el esquema de jornada de clase, y aconseja la formación constante en este espíritu. Dice, entre otras cosas: «En estos momentos en que la sociedad española necesita de ideas y de iniciativas constructoras de una convivencia pacífica en la que participen todos los ciudadanos de todas las ideologías, el mensaje del Día Escolar de la No-violencia y la Paz adquiere todo su sentido de valiosa aportación educativa para la concordia entre todos los ciudadanos».
Gandhi: el pacifismo político
Hace veintinueve años que Gandhi fue asesinado, al atardecercuando se dirigía al templo, entre la multitud que lo esperaba, y a manos de un joven hindú. Había nacido en 1869, toda su vida estuvo del lado de la independencia de la India, entonces colonia británica. La no cooperación y la no violencia son sus fórmulas políticas: con ellas, particularmente con la huelga de hambre, se convierte en la insignia del nacionalismo radical e intransigente.En 1920 se hace cargo de la presidencia del Partido Nacionalista del Congreso; en esa fecha, Tagore le saludará como Mahatma -Gran Alma- y este nombre hará olvidar el suyo: Mohandas Karamchand.
Pasa por la cárcel desde su juventud varias veces, y el ayuno -Iía huelga de hambre- será su arma para imponer la paz entre hindúes y musulmanes, a poco de proclamarse la independencia de India y Pakistán. Su mujer inuere en la cárcel cuando, en 1943, permanecen ambos detenidos.
Su religión de infancia se basa en el principio de Ahimsa, hacer el bien. Nunca se hará católico- porque según manifestó, varias veces, veía una gran contradicción entre la doctrina evangélica y la práctica eclesiástica. Poco antes de morir escribió: «De la misma manera que la formación para la violencia implica el aprendizaje en el arte de matar, la formación en la no-violencia implica el aprendizaje en el arte de morir».
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