Pedro Pirfano,

director de la Orquesta Sinfónica de Bilbao, cuya existencia está en peligro por las bajas remuneraciones de los músicos y que también dirige el Conservatorio bilbaíno, es, al parecer, un hombre autoritario: sin contemplaciones ni diálogo previo, expulsó del centro docente a un equipo periodístico de Radio Televisión Española, expresamente desplazado desde Madrid para realizar un reportaje sobre las orquestas y la situación de los conservatorios en la zona Norte del país. Se cree que el señor Pirfano pretendía evitar que los profesores y alumnos expusiesen sus opiniones sobre los graves problemas del centro que él dirige, menospreciando, sin duda, la probada capacidad del organismo radiotelevisivo estatal para evitar tal tipo de excesos en la pantalla.