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La mujer está sola

El marido puede insultar a su mujer de la forma más terrible, y llegar, verbalmente, hasta los límites más impensables. No pasa nada. Es preciso que actúe de obra, que le pegue. Pero si la mujer insulta al marido comete una falta. «Nuestra legislación es, con mucho, la más retrógrada de Europa», ha comentado un jurista.En la legislación española el adulterio ha sido siempre considerado como un delito, a excepción del período de la II República, en que sólo era causa de divorcio. En 1939, los derechos que había conquistado la mujer son abolidos y se implanta el Código Civil de 1889; basado en el Código Napoleónico. Además en el Código Penal se incluye una serie de delitos sexuales contra la mujer. Estas son las leyes por las que se rigen, todavía hoy, más de la mitad de los españoles. Unas leyes que discriminan a más de la mitad de la población. Una población que trabaja, produce, participa, tiene voz y está lista para dar su voto, en el momento de las elecciones. ¿A quién votará la mujer, si hasta ahora, ningún partido, ni los que van pasando por ventanilla ni los que se resisten a hacerlo ha pensado en ella? ¿Qué partido ha pensado en que la ley necesita de una rápida reforma, que confiera igualdad de oportunidades, deberes y, sobre todo, igualdad de defensa a la mujer, ante cualquier acusación?

Los juristas no se han preocupado de la mujer. Es ella la que ha iniciado el camino hacia la igualdad. Los grupos de mujeres que ya, en las Jornadas Catalanas de la Dona, celebradas en Barcelona, a finales del pasado mes de mayo y antes en las Jornadas de la Mujer, celebradas, clandestinamente, en Madrid, en diciembre de 1975, exigieron la desaparición de todos los artículos de la ley que discriminan a la mujer. En esta lucha la mujer está sola.

, 16 noviembre

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