"Todos los hombres del presidente"

Un grupo de hombres agresivos, actuando estrechamente y que representan todas las facciones del Partido Republicano han sido los que han hecho posible la victoria de Ford en estas elecciones.Mientras que Carter disponía de un equipo mucho más complejo (tres grupos diferentes de expertos: los organizadores de la campaña, el «transition team o gabinete fantasma, y los organizadores de la «isses operation», grupo de expertos en cada materia de su programa electoral) Ford ha utilizado un solo equipo, más preocupado, en frase de uno de ellos, de ganar votos que de desarrollar un programa. Los hombres claves son los siguientes:

James Baker

presidente del Comité de la campaña electoral.

Nació, en Texas y tiene 46 años. Es abogado de Houston y, graduado en Praceton y Texas. Su carrera política empezó trabajando con George Bush, el jefe de la CIA. Fue su «mánager» en la campaña que perdió para el Senado en 1970 pero le hizo ganar, un 60% de los votos en Houston.

Fue jefe financiero de los republicanos y dirigió parte de la campaña del presidente Nixon en 1972.

Su punto fuerte es tener un auténtico sentido de la organización, algo de lo que carece el equipo de Ford.

Su bufete está conectado con los grandes intereses petrolíferos.

Stuart Spencer

Es el gran cerebro gris de la campaña de Ford en todos sus aspectos técnicos. Lleva dieciocho años haciéndose cargo de diferentes campañas republicanas.

Spencer ha trabajado muy estrechamente con William Roberts con el que le unen vínculos profesionales desde que en 1950 empezaron juntos con los jóvenes republicanos de Eisenhower y Nixon en el distrito de Los Angeles, Dejaron más tarde este partido para crear su propia firma con la que no tardaron tiempo en ganarse una gran reputación como fabricantes de políticos. «No nos importan los programas, era parte de su lema, sólo nos importan los votos». Sus dos primeros clientes,Bell y Rousselot, fueron elegidos para el congreso. Más tarde hicieron que fuera reelegido Kuchel. Su reputación siguió creciendo y en 1964 fueron contratados por Rockefeller para las primarias contra Goldwater. Rockefeller tenía entonces que hacer frente a la gran «tara» electoral que suponía su reciente divorcio. Aprovechando los ataques furibundos de Goldwater en este sentido, Spencer y Roberts' Iograron convencer al electorado' que un hombre con una manera tan irracional de atacar no debería ser nunca dejado al frente del puesto clave de la nación. Goldwater mismo quedó tan impresionado con el equipo que, los recomendó a Reagan para su campaña de 1966. Hicieron de él lo más que pudieron, presentándole como el perfecto ciudadano político, aprovechando la aversión que mucha gente sentía ante la deteriorada figura de estos últimos.

Volvieron a ganar la elección de 1970 para Reagan y a partir de ese momento su estrella empezó a declinar. Se separaron. entonces, pero cuando Spencer fue fichado para la campaña de Ford, Roberts se ofreció inmediatamente para ayudarle.

Sus técnicas electorales más efectivas podrían resumirse diciendo que son los hombres que saben transformar las grandes estrategias en formas vulgares de conseguir un voto, que se despreocupan totalmente de los programas y que una de sus normas clave es: «Siempre atacar, nunca responder a un ataque. »

Robert Teeter

Nacido en Michigan hace 37 años es un antiguo amigo de Ford. Es un hombre realista y el gran experto en empujar al voto a los indecisos.

William Greener

De 51 años de edades el jefe de prensa y comunicaciones en la campaña electoral. Ha hecho por ello mucha sombra a Ron Nessen, el portavoz de la Casa Blanca.

Mantiene relaciones excelentes con la prensa de Washington. Fue, oficial del Ejército del Aire. Más tarde fue subsecretario de prensa en la Casa Blanca y secretario adjunto del Departamento de Defensa en asuntos públicos.

John Deardourff

Copresidente de la campaña electoral, es el hombre que maneja la publicidad.

Ha sido consejero político en Washington desde 1967 y colaboró con éxito en la campaña del anterior alcalde de Nueva York, John Lindsay y del vicepresidente Rockefeller.

Douglas Bailey

De 42 años de edad, tiene el mismo cargo que Deardourff. Fueron socios en una empresa publicitaria y de estudios de la opinión política desde IMI Fue ayudante de Henry Kissinger en Harvard de 1958 a 1962 y más tarde perteneció al «staff", de Rockefeller.

Royston Hughes

Fue ayudante de Morton cuando éste era presidente del comité electoral, es actualmente el tesorero de la campaña.

Rogers C. B. Morton

Tiene 61 años de edad y entró a formar parte de los consejeros políticos del presidente el 1 de febrero pasado.

Ex miembro de la Cámara de Representantes, ex presidente del Comité Nacional Republicano y ex secretario del Interior y secretario de Comercio, sustituyó a Callaway en la presidencia del comité electoral hasta el nombramiento de James Baker.

La nueva Administración Ford

«No tendremos tiempo para ocuparnos de entrenar y buscar gente nueva» ha declarado Ford innumerables veces. No se espera pues, que los cambios en su Gobierno sean muchos, ni inmediatos, pero aún así se espera que algunos miembros del Gobierno sean sustituidos y que otros cesen voluntariamente.

Kissinger probablemente permanezca como secretario de Estado, aunque se habla de Richardson (secretario de Comercio) como posible sucesor. Otros nombres que suenan para este cargo son los de Laird Percy, Mathias, e incluso Connally.

Simon, actual secretario del Tesoro quiere dimitir y se habla de de Alan Greenspan o de Lynn, el actual jefe de la Oficina de Presupuestos de la Casa Blanca, como posibles sucesores.

En relación con la secretaría de Comercio, si Richardson sustituye a Kissinger, los posibles sucesores serían Seidman o Baker, el «mánager electoral».

La mayoría. de los cargos, como decíamos antes, no sufrirán variación y así ocurrirá probablemente con el secretario de Defensa, Rumsfeld y el fiscal general, Levi, que permaneceran en sus puestos. En cuanto al vicepresidente, Rockefeller, pasará probablemente a secretario del Departamento de Estado.

En la Casa Blanca tampoco están previstos muchos cambios:

Si Cheney el jefe de persona se va, David Gergen podría sustituirle. El secretario de Prensa, Nessen, podría ser sustituido por Greener. En cuanto a Bush, el director de la CIA, posiblemente se le dé un puesto político en el Gobierno.