Peligra la retransmisión televisada de los debates entre Ford y Carter
La celebración de los debates televisados entre los dos candidatos presidenciales, único acontecimiento que podría animar la hasta ahora tediosa campaña electoral, fue puesta en peligro ayer, cuando las grandes cadenas de televisión anunciaron su intención de boicotear estos debates, por considerar que las normas por las que deben regirse las transmisiones de los mismos son equivalentes a la censura.
Representantes de las tres cadenas privadas, ABC, CBS, y NBC, y de la cadena pública, PBS, declararon que podrían llegar a negarse a retransmitir los encuentros entre Ford y Carter, a menos que se les permita tomar planos del público asistente. Las normas dictadas por la Liga Femenina de Votantes, órgano patrocinador de los debates, disponen que las cámaras deben tomar exclusivamente planos de los dos oradores.Un directivo de una cadena de televisión dijo que sus equipos pensaban cubrir los debates como una noticia más, y que la audiencia era una parte más de la noticia. Suprimirla, continuó, supondría una forma de censura que «no estamos dispuestos a tolerar». Los debates de 1960, entre Kennedy y Nixon, se celebraron en estudios de televisión, sin asistencia de público.
Por su parte, miembros del staff de los candidatos presidenciales apoyaron la decisión de la Liga Femenina de Votantes, alegando que una audiencia estimada en millones de personas no podía verse influida por los gestos o actitudes de dos, tres, o diez personas del público. «Si no quieren televisar los debates con las normas existentes, allá ustedes», manifestó uno de los organizadores.
«En caso de que la televisión los boicotee, dijo un estratega de Ford, tendremos la mayor cobertura de la historia moderna en la radio y los periódicos».
El primer enfrentamiento entre Gerald Ford y Jimmy Carter se celebrará el próximo jueves en el Walnut Street Theater, de Filadelfia, ante una audiencia de 500 personas, de las que 230 serán periodistas de distintos medios informativos, y las 270 restantes personas invitadas por la Liga Femenina de Votantes. Hasta el momento, según manifestó un miembro de esta organización, se han recibido más de diez mil peticiones de localidades para asistir al debate. Incluso algunas personas enviaron cheques en blanco para comprar las entradas.
Según estaba previsto, las grandes cadenas de televisión formarían un pool, con nueve cámaras en el interior del teatro, cuyas imágenes serían utilizadas a voluntad por cada una de las emisoras durante la retransmisión, en directo, que comenzará a las 9.30 de la noche del jueves y durará hora y media.
Ahora, en caso de que no se llegue a un acuerdo con los patrocinadores sobre las normas técnicas de la retransmisión y la posibilidad de colocar micrófonos entre la audiencia y tomar planos de la misma, las cuatro cadenas nacionales de televisión podrían negarse a retransmitir este primer debate y, presumiblemente, los dos restantes, así como el que mantendrán los candidatos a la vicepresidencia. Una reunión entre los directivos de las cadenas de televisión y la Liga Femenina de Votantes se celebrará en las próximas horas para intentar llegar a un acuerdo.
McCarthy, excluido
Otro problema que podría haber puesto en peligro la celebración de los debates se resolvió ayer cuando un juez federal rechazó la petición del candidato independiente, Eugene McCarthy, y del candidato del Partido Americano, Tom Anderson, de participar en los encuentros, aludiendo al derecho de todos los candidatos a la presidencia a beneficiarse del mismo tiempo frente a las cámaras. El juez dijo que la Liga Femenina de Votantes tenía derecho a elegir a los dos candidatos de los partidos mayoritarios y que esta era una decisión de «sentido común».Mc Carthy y Anderson anunciaron su intención de recurrir a un tribunal de apelación. Por su parte, otros dos candidatos de partidos pequeños, Peter Camejo (Partido Socialista de los Trabajadores) y Lester Maddox (Partido Americano Independiente) reclamaron su derecho a participar en los encuentros televisados, sin que hasta ahora se haya producido un fallo judicial al respecto.
Aparentemente ajenos a la amenaza de boicot por parte de las emisoras de televisión, el presidente Ford y Jimmy Carter dedicarán el fin de semana a prepararse para el debate del próximo dia 23, en el que discutirán ternas de política interior y económica. Los expertos atribuyen a estos enfrentamientos ante las cámaras una gran influencia sobre los electores, principalmente entre los independientes.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.