Pagan parte de una hipoteca que no les corresponde

Ciento ocho vecinos del Parque María Luisa, en Móstoles, están a la espera de que se decida la querella criminal que su abogado ha planteado contra la constructora Agracón, que se declaró en suspensión de pagos sin haber abonado al Banco Hipotecario de España una serie de cantidades que previamente, había cobrado a los vecinos.Después de que la empresa hubiera cobrado dos semestres a los propietarios del Parque María Luisa, sin haber pagado al Banco, los vecinos tuvieron noticia de esta anomalía, ya que el Banco Hipotecario comienza a pasar los recibos a los propios interesados. Agracón se había declarado en suspensión de pagos. En otoño del pasado año estos vecinos, a través de su abogado, presentan una querella criminal contra Agracón y, por consejo de este mismo abogado, dejaron de pagar los recibos que pasaba el Banco, tanto las letras sobre hipotecas como las normales sobre la venta del piso. Al mismo tiempo, el letrado emprendió una acción ante el juez que llevaba el caso para conseguir una autorización que libere a los vecinos del pago de letras.

Poco después, la querella se paralizó porque uno de les miembros de la empresa, accionista, es consejero nacional. También se denegó la suspensión del pago de las letras, Los bancos que tenían estas letras y los particulares comenzaron a recibir requerimientos de embargos preventivos. Los vecinos presentaron recurso y el Banco Hipotecario de España sacó un piso a subasta para el próximo día 27 de septiembre. Algunos vecinos pagaron parte de la cantidad exigida por el Banco y, posteriormente, pagan todos los demás.

La situación actual de los 108 vecinos de Parque María Luisa es de espera en tanto pueda llevarse a cabo la acción judicial de querella contra la constructora.

Caso de no haber pagado los recibos, o al menos parte de ellos, los pisos hubieran salido progresivamente a subasta; el primero, como ya queda. reseñado, a finales del próximo mes; diecisiete, después, y a continu ación todos los demás. La cantidad inicial que deberían abonar era de 280.000 pesetas, de las que la mayoría han pagado, al parecer, la mitad.