"Mi padre ha sido amenazado de muerte"

Los hechos producidos en la Agrupación Nacional de Panadería, durante los cuales Emilio Alonso Munárriz efectuó varios disparos, y la posterior detención del industrial panadero en Soria, han motivado la visita del hijo del inculpado a EL PAIS.

José Eugenio Alonso Las Heras, industrial, se ratifica en las manifestaciones que su padre, Emilio Alonso Munárriz, hiciera a EL PAIS el pasado sábado 3 de julio: «Soy un hombre de paz y no intentaba matar a nadie. Sólo quería que todo el mundo supiera quiénes eran los responsables de que el pan continúe tan caro.»-¿Qué causas supone usted que motivaron la reacción de su padre?

-Mi padre, en repetidas ocasiones, ha sido amenazado de muerte e incluso ha resultado agredido, como ocurrió en la primavera pasada, por un desconocido que lo atacó en las dependencias de la Agrupación Nacional de Panadería, hecho que fue denunciado en el Juzgado de guardia. El estado en que quedó su rostro fue recogido, en muestras gráficas, en la prensa. Posteriormente a ese suceso, al salir de la Agrupación Provincial, otro día, se produjo un nuevo intento de agresión contra él por parte de otra persona que se le acercó con idea de golpearlo. Durante doce años, mi padre ha venido denunciando el fraude del pan, negocio en el que se mueven miles de millones de pesetas, sin haber conseguido resultados positivos. Con insistencia, ha puesto en conocimiento de muchas personalidades políticas de la Administración las anomalías por él detectadas en este grupo. Desde informes a Direcciones Generales y Subdirecciones Generales, hasta Ministerios y al propio presidente de Gobierno han recibido estos datos a los que me refiero. Y, en los últimos meses, a raíz de la reciente subida del pan, mi padre ha pretendido abaratar el precio de este producto, con el concurso de algunos expendedores, tarea en la que se ocupaba, como ha quedado demostrado en el sector de Entrevías, donde el pan ha bajado, según recogía ayer mismo un diario de la tarde, aunque otros medios informativos hayan divulgado lo contrario. En estos momentos se pretende conseguir de una forma marcada este abaratamiento, aunque ello no depende exclusivamente de mi padre.

-¿ldentifica usted todo ello con el recrudecimiento de las tensiones?

-Mire usted, mi padre es presidente de la Lucha contra el Fraude del Pan, en Madrid. Tras estos vanos intentos de abaratamiento, por su parte, se han recrudecido las maniobras encaminadas a boicotear el suministro de harina a nuestra empresa, de la que mi padre es presidente.

-¿En qué consistiría el boicot?

-Consistiría en presionar sobre los proveedores de harina, al parecer mediante amenazas de imposibilitarles la venta en Madrid si siguen suministrando a nuestra firma.

-¿Qué opina de los sucesos ocurridos?

-No creo que mi padre haya sido el causante del incendio, como le atribuye el presidente de la Agrupación de Panadería, señor Castro. Parece extraño que si este señor conocía la posible amenaza de atentado que pesaba contra esos locales, no se tomaran las medidas oportunas para evitarlo. Conviene puntualizar que mi padre no es un delincuente y que llegó a Soria de madrugada. En la ciudad se conocía su presencia en nuestro domicilio y fue a las dos de la tarde del sábado, aproximadamente, cuando se le comunicó la orden de detención.