Antonio Gala,

autor teatral y procesado, político, que había recibido en días anteriores gravísimas amenazas, pudo ser visto en un restaurante madrileño con toda la apariencia externa -rostro tumefacto,- de sido golpeado. El atentado, realizado al parecer por tres individuos, se atribuye a los ya habituales incontrolados que integran los grupos terroristas de extrema derecha, de quienes procedían las amenazas previas. Gala, que fue atacado hasta perder el conocimiento, se encontraba trabajando en un lugar de la sierra. El escritor declaró ayer mismo ante el Juzgado de Prensa e Imprenta, en donde se le sigue un nuevo proceso -tiene otro pendiente en el TOP-, precisamente por un artículo donde se refería a las amenazas recibidas y a la falsa noticia de su muerte.