Ojeda sí podría ir a Montreal

La Federación de Judo, por unas cosas o por otras, está de actualidad casi permanente. Al margen de los problemas que existen y de los que algunos tienen que ser forzosamente culpables, ello es bueno, no cabe duda. Significa, ni más ni menos, que hay interés por su movimiento y es obvio que sólo del caminar se hace camino.En el seno federativo, y eso nos parece muy bien, se contesta o aclara inmediatamente cualquier tema que ha salido a la luz pública y que en su opinión «no está claro». El último caso se dio ayer. Se trata de justificar por qué sólo dos judokas españoles lucharán en Montreal: Juan Carlos Rodríguez en los pesos semimedios y José Luis de Frutos en los medios y en todas categorias.

En la nota aclaratoria se deja sentado algo ya sabido, como es que en los Juegos Olímpicos sólo puede participar unjudoka por categoría; es decir, seis: ligeros, semimedios, medios, semipesados, pesados y todas categorías. A continuación se dan las razones más o menos diplomáticas de que a pesar de los éxitos internacionales conseguidos en los últimos campeonatos europeos y mundiales, así como en otros torneos de cierto nombre, la realidad es que nuestro nivel no está para más participantes olimpicos.

Estamos totalmente de acuerdo. Pero si la polémica residía en Ojeda, se mantiene. No dudamos que por los problemas económicos y su relación «no ata» con la Federación haya dejado de entrenarse lo suficiente. Tampoco que es un veterano de vuelta en el judo y que la lucha canaria le ha sorbido el seso, porque también le ha llenado el bolsillo y a nadie le gusta desperdiciar un dinero fácilmente ganado gracias a sus habilidades. Hasta ahí, conformes. Ojeda no debe ir a Montreal. De Frutos y Rodríguez, además, estuvieron tres meses en Japón, cosa que Santiago no hizo. Dejamos aparte a Sans, pues al no poder ir más que un solo judoka por peso la elección entre él y Rodríguez recayó en este último simplemente porque se lo tomó al final con más interés.

Sin embargo, pese a todos esos inconvenientes, opinamos que Ojeda debería haber ido a Montreal. Y ya no decimos «ir», porque el Comité Olímpico Español estará suficientemente convencido. ¿Por qué? Porque Ojeda, aunque no esté bien, es siempre Ojeda. Sí, el único judoka español que impone todavía resupeto en el campo internacional. Juan Carlos Rodríguez, con sus últimos éxitos, será un perfecto desconocido para soviéticos, polacos, alemanes y demás «monstruos», Los japoneses si le conocen de su estancia en Tokio, peroya se sabe que son un mundo aparte. En cuanto a De Frutos, sí, es el segundo hombre de categoría internacional. Pero bien reciente, eso desde luego. El mismo nos ha contado más de una vez cuándo se dio a conocer realmente fuera de nuestras fronteras.