_
_
_
_
Tribuna:DIARIO DE UN SNOB
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Revival Escrivá

El año pasado tal que ahora moría en Roma, como del rayo místico, monseñor Escrivá. Estaba yo en casa de un amigo, crítico de arte, paseando su colección de cuadros -¿tendrán los críticos de cine un harén de nadiuskas?-, pero, ágil reportero como soy, corrí a la finca de un antiguo miembro del Opus (lo propio de los antiguos miembros del Opus es tener una finca) a que me contase cosas:-Pues nada, qué quieres que te diga, yo creo que monseñor quería ser Papa. Nos enseñaba la pensión madrileña donde se decía que se le había aparecido Jesucristo, le gustaba Conebita Piquer, no entendía de música, de arte ni de literatura, era un imaginativo, un soñador y la realidad de la cosa tenía que llevársela este Portillo que ahora va en cabeza.

Como ven, el rencor, el resentimiento y el oscuro descontento hablában por boca de este desengañado con finca. Pero lo malo de los riencorosos, los resentidos, los descontentos y los desengañados, aunque tengan una finca, es que suelen decir verdades de a puño Ahora, al año aproximado de su muerte, en la Universidad de Navarra se ha organizado un revival Escrivá con medallas, mucetas y bandas. Me hubiera gustado estar allí, pero tengo que ir a Pamplona por los sanfermines, y volver dos veces a la misma provincia en un solo año es cosa que el escritor no debe hacer nunca, porque en seguida te desmitifican, y a un escritor desmitificado se tiene por costumbre pagarle menos los artículos. Pero Juan Luis Cebrián sugería el domingo en este periódico que vuelven a andar por ahí los lópeces.

Claro que el revival del Opus Dei no puede ser como el revival de los Rolling Stones, que han tenido que echarle cubos de agua fría al personal, en Barcelona, para calinar el furor de vivir de las fans. El Opus también echaba cubos de agua fría y bendita a sus ministros (ministros de la Iglesia o del Gobierno) para mantenerles castos, hasta que vino Fraga, desfaciendo tartufos y se acabó el viento. Ahora que Fraga anda herido de sí mismo, como casi siempre (queriendo pescar una trucha en León se ha pescado él en lo que tiene de pez, entre dos aguas), ahora, digo, reverdecen los lópeces. Lo que pasa es que los lópeces ya no traen cruz alzada, y así como los Rollings, a quienes vi una vez en Europa (met gustan cantidad, mucho más que los Beatles, siguen fieles a sí mis.mos y han cogido, como Johnny, su viejo fusil en forma de guitarra electrónica, al revival de los lópeces, por contra, es una cosa convencional, circunstancial, con cambio de color y de camisa (no diré de chaqueta.).

Iba yo a comprar el pan cuando me enteré de la noticia. Yo voy to das las mañanas a comprar el pan (ahora los panaderos de la provincia se niegan a bajar el precio), y de paso, si se tercia, cojo algún periódico, pero comprando el pan es cuando me cruzo en el barrio con Luis Apostúa, o Castillo-Puche, o Carlos Luis Alvarez, o Dicenta, o Aute, según las épocas, vecinos to dos que también compran el pan, y ellos son los que realmente me informan, más que el papel. Hasta suelo encontrarme a aquel viejo y juvenil amigo opusdeísta de los años sesenta, si bien él no compra el pan, que para eso está la criada, y monseñor dejó muy claras estas cosas en Camino. -Qué, parece que volvéis- -Nuestro reino no es de este mundo- y pone la mirada vaga en los cielos de monseñor.

No, su reino ya no es de este .mundo. Puede que sigan. exportando al cielo almas sin lanzadera, Pero otras exportaciones no tienen. Así que el Revival Monseñor, en Pamplona, no ha debido ser, ni con mucho, la apoteosis de los Rollings en Cataluña. La gente está por la guitarra eléctrica, y lo del Opus era música celestial.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_