Irlanda niega la extradición de un activista del IRA

Dos protestantes murieron ayer en el Ulster víctimas de los disparos de unos pistoleros. El hecho ha dado oportunidad a los unionistas para intensificar sus actividades de vigilantes en diversas partes de la provincia. Mientras tanto, en Dublín un juzgado se ha negado a aplicar la extradición a un terrorista que hace un año lanzó una bomba contra la casa londinense del ex primer ministro Heath. El juzgado irlandés ha aceptado la explicación dada por el acusado. Según él, el atentado tenía motivos políticos.La decisión irlandesa de no aceptar la demanda británica de extradición extraña sobre todo porque hace muy pocos días el Gobierno del Eire puso en práctica un sistema legal que anuncia las más severas medidas contra los terroristas, hayan cometido sus delitos en Gran Bretaña o en Irlanda. Parece que Dublín guarda sus dispositivos legales para aplicarlos contra los que hayan causado daños más importantes o para aquellos que hayan atentado contra las fuerzas de seguridad.

El Gobierno de Londres parece que va a protestar ante las autoridades irlandesas por esta negativa a colaborar con la justicia británica, que ha pedido la extradición del terrorista no sólo por haber causado la explosión en la casa de Heaht, sino por otros delitos cometidos por él en Gran Bretaña.

En el mismo terreno de las relaciones inglesas con el exterior, el Foreign Office anunció ayer que enviará un observador al juicio que el próximo martes se iniciará en Angola contra 10 súbditos británicos. Los 10 eran mercenarios que trabajaban para el ejército del FNLA. Uno de ellos, el llamado «coronel Callan» ordenó la ejecución de 14 compañeros suyos porque se habían negado a cumplir sus órdenes.

El Gobierno de Angola autorizó hace unas semanas la presencia en el juicio de un abogado inglés, que se encargara de la defensa privada de uno de los acusados. Al mismo tiempo, Angola había pedido la presencia oficial británica en el juicio. Gran Bretaña y Angola no mantienen relaciones diplomáticas. El enviado del Foreign Office no será la única representación extranjera que acuda a Angola para estar presente en las audiencias. Al juicio, que al parecer será televisado, han sido invitadas diversas organizaciones internacionales. El tribunal lo compondrán civiles y militares.