El médico detenido en San Sebástián, acusado de colaborar en la fuga de miembros de ETA

Justo Martín Atristaín, médico de San Sebastián, detenido, por cuya situación se interesaron unos 400 compañeros guipuzcoanos, en carta dirigida al ministro de la Gobernación, se encuentra acusado por la policía de colaborar en intentos de fuga de presos pertenecientes a la organización ETA.

En efecto, una nota distribuida por el Gabinete de Prensa del Ministerio de la Gobernación, da cuenta de que la Guardia Civil detuvo el 6 de mayo último, en Tolosa, a José María Izaguirre Goya, que trasladaba en una furgoneta «gran cantidad de propaganda de ETA-V Asamblea». El detenido declaró que «formaba parte de un comando encargado de la realización de un proyecto de fuga de reclusos etarras de las cárceles de Martutena (San Sebastián) y de Burgos».Estas declaraciones llevaron a la detención del médico de San Sebastián, Justo Martín Atristain, de veintiocho años.

La misma nota de la Dirección General de Seguridad afirma que el señor Atristaín «colaboró en el proyecto de evasión de presos de la cárcel de Martutene, tomó parte en el intento de introducir en España un comando de ETA, que tenía como misión finalizar el proyecto aludido, trabajó también en el proyecto de evasión de los internados en el penal de Burgos y se hallaba elaborando un plan de evasión del miembro de la organización, Ignacio Hernández Lasa que, en calidad de detenido, se encontraba hospitalizado en el Hospital Provincial de San Sebastián (centro médico donde éste presta sus servicios)».

La nota oficial termina afirmando que el médico detenido trabajaba en compañía de Víctor Manuel Guerra Múgica, miembro liberado de ETA, también detenido, y al que acompañó, por dos veces, a Burgos y permaneció vigilando en el exterior del colector de la cárcel, mientras Guerra Múgica efectuaba en el interior de aquél, «el estudio y proyecto de los trabajos».

En relación con la fuga de la cárcel de Segovia, próximamente quedará concluido el expediente reglamentario. Se ha tomado declaración a cada uno de los evadidos capturados, así como a los funcionarios de la prisión. De las diligencias que se han practicado se deducirán las responsabilidades que procedan.

Además del expediente incoado por vía reglamentaria, existen las diligencias que continúa practicando sobre el caso la autoridad judicial.

La fuga de la cárcel de Segovia tuvo lugar el pasado día 5 de abril y participaron en ella 29 reclusos -pertenecientes a ETA y FRAP-, de los que 25 fueron capturados posteriormente y otros cuatro lograron pasar a Francia.