Semana de realización de beneficios

Después de tres semanas seguidas de fuerte alza, la Bolsa parece que ha perdido la brújula de navegar, volviendo a descender por debajo de la par el índice general del mercado madrileño.Ha sido un desenlace un poco inesperado, porque realmente parecía que habiamos cambiado la tendencia de fondo y, ahora, sin embargo, queda la duda de si todo ha sido una gran maniobra, orquestada y aderezada por importantes declaraciones de nuestros primeros, hombres de la Banca (Aguirre Gonzalo, Escámez, etc.).

Pero también puede haber sido algo mas simple: las realizaciones de beneficios, lógicas después de las sustanciosas plusvalías precedentes.

Las dos primeras sesiones de la semana fueron claramente bajistas, en especial la primera, cuya interisidad. (-2,11 por ciento) sorprendió a todos los asistentes al parquet. La subida del jueves, coincidiendo con la visita del ministro -de Hacienda, no fue aclaratoria, y el viernes la baja era general, sin perspectiva alguna de mejora, y, con claro predominio del papel.

El departamento bancario ha sido el más castigado en los últimos días, seguramente porque también fue el más beneficiado en las alzas precedentes.

Entre los valores eléctricos también se produjo una fuerte contracción, especialmente en Sevillana y Unión. El índice parcial lleva perdido en lo que va de año, más de un 14 por 100.

Otro corro con gran desmerecimiento fue el minero-siderúrgico, aunque aún ocupa su índice sectorial el primer lugar, con un rendimiento del 16 por 100. Hornos y Echevarría, a citar por sus recortes.

Pero donde hubo gran movimiento fue en el grupo Químico, a cargo principalmente de Petróleos (Explosivos estuvo apagado) que, después de descontar dividendo el viernes, cerraba a, 503. Sigue hablándose de los hallazgos petrolíferos y los más recientes del Cantábrico pueden dar más juego bursátil, en particular a Campsa, muy fuerte últimamente, y, que forma parte del consorcio descubridor.

En general no ha descendido el volumen de negociación y hay la impresión de que existe dinero a la espera, para entrar, quizá, cuando se defina un poco más la trayectoria del mercado. Como decimos, terminó la semana muy desdibujada y, aparentemente, hacia abajo.