Aficionados y familiares del Mallorca denuncian “acoso” y “tocamientos” en la Supercopa de España

La Supercopa de España vuelve a estar en la picota. Esta vez no es por las comisiones millonarias destinadas a Gerard Piqué y Luis Rubiales, ideólogos del traslado de la competición a Arabia Saudí, ni por la falta de ambiente que afecta a algunos de los equipos en Yeda. “No tiene ningún sentido que juguemos en Arabia. Es una lástima porque un partido tan atractivo como este, si se hubiese jugado más cerca, habría llenado el estadio con muchísimos aficionados nuestros”, protestó Iñaki Williams tras la derrota frente al Barcelona en la semifinal.

Real Madrid RMA

3

Jude Bellingham 62', Valjent 92' (pp), Rodrygo 94'

Mallorca MLL

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Finalizado

El nuevo problema, sin embargo, es de seguridad. Una situación lamentable que sufrieron seguidores y miembros de la expedición del Mallorca tras el partido contra el Madrid: se denunciaron “tocamientos” y “acoso” a mujeres de jugadores y aficionados. “Tan pronto nos lo comunicaron, la seguridad comenzó a trabajar, en colaboración con el Mallorca y las autoridades locales. Estamos intentando recobrar toda la información para actuar”, aseguran desde la RFEF.

“La salida ha sido un poco complicada. Hemos salido con los niños y hemos estado sin seguridad”, relató a Esports IB3 Cristina Palavra, pareja de Dani Rodríguez, futbolista del Mallorca. “La verdad”, prosiguió Palavra, “es que los chicos de este país se han puesto a hacernos fotos de cerca y nos han estado acosando. A Natali, la mujer de Dominik Greif, también. Nos hemos sentido un poco desubicados. No teníamos a nadie protegiéndonos. La salida ha sido muy mala”. Con su hija en brazos y acompañada por el resto de la delegación, Palavra se tranquilizó al acceder al autobús de la organización, que la llevaría de regreso al hotel.

Entre seguidores, familiares y amigos, el Mallorca fue arropado por cerca de 300 personas, según datos de la entidad balear. Sin embargo, no solo los familiares de los futbolistas se vieron afectados. “Durante el partido no nos cuidaron. Nos colocaron mezclados con aficionados locales que nos estuvieron provocando”, explicó un seguidor del Mallorca en Yeda a la Cadena Cope. Según el mismo aficionado, eso no fue lo peor: “En el trayecto de la grada al autobús, de unos 15 o 20 minutos, todo el rato nos han estado increpando, nos hacían pasillos, centenares de personas haciéndonos fotos sin consentimiento, pegándonos incluso collejas, burlándose de nosotros, haciéndonos el 3-0 con los dedos... Muy, muy desagradable”. El comportamiento fue aún más invasivo y desagradable con las mujeres: “Han sufrido tocamientos”.