Koundé, de llamar la atención por su ‘look’ a frenar a Mbappé

En el Barcelona no había una lista con las 10 mejores acciones defensivas de Jules Koundé (París, 25 años); por supuesto, tampoco había otra con sus 10 mejores goles (suma tres). Sí, en cambio, se enumeraron los más llamativos looks del francés: desde llevar un gorro con las orejas de Batman a pasearse por la zona mixta con pantalones cortos y corbata. No es raro verlo de compras por Roma durante un parón de selecciones, ni sorprende que se haya aliado con el diseñador Goba Noel para crear la marca de ropa Homies From Paris (HFP). Sobre Koundé se podía hablar de estilismo y peinados, de pataletas ante Xavi Hernández y de su lugar en el vestuario. Pero de fútbol, poco. Hasta que el Barcelona se cruzó con el PSG en París en los cuartos de final de la Champions League. Es decir, hasta que Koundé se enfrentó a Kylian Mbappé. Nada más y nada menos.

“Tenéis muchas cuestiones sobre Mbappé”, respondía Koundé, al mismo tiempo que intentaba disimular con una sonrisa cómo se le torcía el gesto cuando se repetían las preguntas sobre el crack del PSG. “Preferiría hablar de nosotros mismos”, se quejó en la previa, la semana pasada en el Parque de los Príncipes. No le faltaba razón. Y para contrarrestar, habló en el campo: el delantero llamado a heredar el trono de Lionel Messi cerró el partido de ida con tres disparos: uno fuera, dos bloqueados; ninguno a puerta. Además, perdió 13 balones y solo salió exitoso en el 20% de sus regates. Su kriptonita: Koundé. “Es un jugador diferencial al que conozco bien porque compartimos selección. Marca la diferencia y vamos a intentar pararlo”, anticipó el defensa del Barcelona.

“Yo estoy encantadísimo con el rendimiento de Jules. Te diría que es un fichaje personal casi mío. Sé de lo que es capaz. Para mí es uno de los mejores del mundo, le gusta defender, está pendiente de las vigilancias, es líder. Tiene muchas virtudes. Muchas”, lo elogió Xavi Hernández, tras el partido frente al equipo de Luis Enrique.

No engaña Xavi. En el verano de 2022, cuando el Barcelona salió con todo al mercado gracias a la venta de activos (palancas, según el presidente Joan Laporta), el técnico azulgrana insistía en que quería a Koundé. Y para que el defensa no cayera en la tentación de la Premier League, el entrenador del Barça telefoneó una y otra vez al entonces jugador del Sevilla. “Fueron conversaciones muy precisas. Se notaba que había visto mis partidos”, recordaba Koundé, en una entrevista con EL PAÍS. Sin embargo, en el Barça al francés le pasó lo mismo que con su selección: Xavi lo orilló al lateral. Y no le gustó. No le gustó nada. “El míster lo sabe. En el Sevilla jugaba siempre de central”, agregó en la misma conversación. La protesta de Koundé alteró tanto a la plantilla ­—”¿de qué se queja si juega siempre?”, advirtió un compañero—, como también a la dirección deportiva: “Si no le gusta que traiga una oferta de 50 millones y nosotros le diremos que gracias por todo”, exponían fuentes de la secretaría técnica.

En el siguiente verano, Xavi volvió a tener una nueva conversación, esta vez cara a cara, en la que intentó calmar a Koundé. “La idea es jugar con tres centrales. La idea es que tú seas el derecho”. La frase fue utilizada como un placebo para el jugador: el Barça ya utilizaba el 3-4-3. Sin embargo, Xavi también le dijo a la dirección deportiva que necesitaba fichar un lateral. Su preferido era Foyth, del Villarreal, de corte más defensivo que ofensivo, el perfil opuesto a lo que terminó en Can Barça, Cancelo. Ocurrió, entonces, que Koundé comenzó a jugar más de central y Araujo de lateral. Algo molestó al uruguayo —también se quejó públicamente—, al resto de la plantilla, y afectó al rendimiento defensivo del equipo. El Barcelona era un boquete: en los primeros 32 partidos encajó 46 goles, los mismos que había recibido en 53 encuentros en la campaña anterior.

Xavi recalculó. Ninguna fórmula mejor que la de volver al pasado: Koundé de lateral y Araujo de central. A los que se le sumaron Cubarsí, como compañero de eje del uruguayo, y Cancelo para dar profundidad. “Creo que hemos encontrado una solidez en defensa. Trabajamos juntos en defensa, como un bloque y esto nos ayuda a ganar los partidos. Gracias a esto también somos un Barça más eficaz”, subrayó Koundé. Llamó la atención y no fue por su estilo. Y si no que se lo pregunten a Mbappé, que buscará su revancha en Montjïuc.

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