El segundo descenso del Real Valladolid en cinco años agrieta el proyecto de Ronaldo

Ronaldo Luiz Nazario da Lima compró el Real Valladolid en 2018 y aseguró que cinco años después lo llevaría a Europa. Ha transcurrido ese lustro y la promesa se ha desinflado: el territorio continental que visitará el equipo el próximo curso será el de Andorra, rival en Segunda división, categoría a la que descendió hace unos días el club blanquivioleta por segunda vez en el mandato del brasileño. Las dudas se ciernen sobre el proyecto. Ronaldo salió el lunes en rueda de prensa, apenas 12 horas de consumarse la caída, para dar explicaciones y lo que consiguió fue indignar a la afición, llamando “radicales” a las peñas que se han opuesto al cambio de escudo ejecutado el año pasado, y atacando al anterior alcalde por no dar subvenciones para la entidad.

Los números cantan. Desde 2018 la ciudad ha vivido dos permanencias, el descenso de 2021, el ascenso de 2022 y esta nueva caída. El primer varapalo se produjo sin que la dirección se atreviera a despedir al entonces entrenador, Sergio González. Sí se cesó a José Rojo ‘Pacheta’ esta primavera, con el equipo a un punto del descenso, reemplazándolo por un desconocido Paulo Pezzolano cuya continuidad ha sido ratificada para la categoría de plata pese a sus malas sensaciones y resultados. También seguirá el director deportivo, Fran Sánchez, con el desafío de armar un plantel competitivo en la exigente Segunda un año después de celebrar el ascenso directo con Pacheta.

La temporada ha transcurrido con un gran apoyo social, con la cifra inédita de 20.000 abonados. Las principales críticas sobre Ronaldo y sus allegados han respondido al cambio de escudo, con frecuentes cánticos de “El escudo no se toca” o “El escudo devolvedlo” por parte de la grada de animación. Solo durante unos minutos del Real Valladolid - Mallorca (3-3), en abril, el primer encuentro de Pezzolano, se escuchó “¡Ronaldo vete ya!” hasta que el pasado domingo, al consumarse el descenso ante el Getafe en casa, se reprodujeron de nuevo esos gritos. El aludido tildó el lunes a esa parte de la hinchada de “radicales” y sostuvo ante los rumores de venta que solo se irá cuando deje “un legado” aún por llegar en materia futbolística más allá de los avances del Real Valladolid como marca o en lo extradeportivo.

El colectivo de animación Fondo Norte ha emitido un comunicado contra las “vergonzosas y sorprendentes” declaraciones y han insistido en ser “libres de pensar y opinar” en su afán por recuperar el escudo. Además, inciden en que su labor “altruista” ha contribuido a generar buen ambiente en los encuentros. La Federación de Peñas, consultada por EL PAÍS, prefiere no pronunciarse de momento ante las “graves declaraciones” del dueño del Pucela y esperarán a obtener más información antes de significarse.

Pulso con el Ayuntamiento

El exdelantero atacó al regidor en funciones, Óscar Puente (PSOE), por no dar financiación a la entidad: “Pasados los cuatro años no ha hecho absolutamente nada por el Real Valladolid”. Puente lamentó la falta de autocrítica del dirigente tras las dos debacles deportivas en el lustro de mando e informó en entrevistas radiofónicas en la Cadena Ser y Cope que el Ayuntamiento ha aportado cinco millones a la entidad: “El problema de Ronaldo es que no sabe dónde está. No sabe ni en el país en el que vive ni en la ciudad en la que ha aterrizado. En España lo que pretende no es posible. Ni yo le puedo regalar el estadio ni le puedo ceder el estadio durante 50 años y asumir yo los costes”. El presidente del Pucela también anunció el lunes que el probable nuevo alcalde, Jesús Julio Carnero (PP), se ha comprometido a ayudar al conjunto, además de buscar iniciativa privada para impulsar al club. El exalcalde pucelano Javier León de la Riva (PP), sin embargo, ha apoyado a su sucesor socialista al considerar “una pasada” que el brasileño culpe del descenso a las políticas consistoriales.

La faceta extradeportiva protagonizó buena parte de la intervención del alto cargo, poco dado a ruedas de prensa y visiblemente molesto durante la comparecencia, donde también lanzó alguna pulla para los medios de comunicación. Allí afirmó haber invertido 18 millones en mejoras para el estadio, de titularidad municipal, como la retirada del viejo foso o una reforma en las oficinas, vestuarios o interior del Nuevo José Zorrilla. La cifra no dista mucho de los 25 millones con los que Carnero indicó en campaña electoral que acometería una remodelación importante del feudo del Real Valladolid como recubrirlo por completo. Ronaldo negó rotundamente que aspirara a vender el club e insistió en que permanecerá en el cargo hasta alcanzar ese “legado” prometido pero lejano en materia deportiva, con el desafío de ascender de nuevo por segunda vez en tres años. El Pucela ha padecido cinco descensos en lo que va de siglo, el equipo que más en Primera, sin que la nueva propiedad haya revertido la tendencia de “ascensor” del decimotercer mejor equipo de España según la clasificación histórica de la Liga.

El ratificado Fran Sánchez encara ahora el reto de cuajar una buena plantilla para un Pezzolano que parte con el estigma del fracaso de la permanencia. Jugadores clave como Larin, Amallah, Hongla o Plata podrían salir de ese vestuario como consecuencia de su alto sueldo. Los índices salariales de la Liga marcarán la potencia económica del Real Valladolid, cuyo prestigio deportivo ya no es tan atractivo tras la inestabilidad ofrecida en los últimos años pese a la irrupción de Ronaldo.

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