_
_
_
_

Àlex Corretja: “El tenis es una trituradora psicológica”

El español, doble finalista en París y hoy voz del canal Eurosport, charla sobre las opciones de Alcaraz y Djokovic, y la erosión mental de un deporte ultraexigente

Alex Corretja, en las instalaciones de Roland Garros. / EUROSPORT
Alex Corretja, en las instalaciones de Roland Garros. / EUROSPORT
Alejandro Ciriza

Àlex Corretja (Barcelona, 49 años) va y viene sin parar, micrófono en mano siempre y ojo avizor para la caza y captura del protagonista. Hace un alto y departe, extendiendo su mirada panorámica sobre este Roland Garros distinto. Ya se sabe, no está Nadal. Él, hoy comentarista, rozó en dos ocasiones la gloria en París; le privó de ella la primera vez Carlos Moyà, en 1998, y en la segunda chocó con la dimensión de Gustavo Kuerten, en 2001. Enamorado de su deporte, estos días es la voz de la señal internacional del canal Eurosport, que hasta el 11 de junio, día del episodio final de esta 127ª edición, ofrece una profunda cobertura televisiva que incluye cerca de 300 horas de emisión en directo.

Pregunta. Primavera, mayo, Roland Garros… y, por primera vez desde 2005, Nadal no está aquí. ¿Raro, verdad?

Respuesta. Escucho eso y se me pone la piel de gallina, por muchos motivos. No va a estar Rafa, y eso convierte a este Roland Garros en algo tan atípico, tan extraño y tan abierto a la vez, que tal vez pueda ser el más imprevisible de los 15 últimos años. Históricamente, cuando hablamos de París lo hacemos de Rafa y luego los demás, porque siempre volvía a aparecer, pero este año no va a ser posible y lo convierte en un evento muy abierto; el abanico de favoritos crece y te preguntas quién va ser capaz de gestionar todo lo que conlleva este torneo, que como todos sabemos es muy cambiante.

P. Como jugador, ¿le hubiera descolocado mucho este nuevo mapa?

R. No, al contrario. Por una parte, estoy triste, porque lo de Rafa supone un golpe, pero por otra tengo una gran expectación por saber quién puede llevárselo y quién maneja mejor las cartas. El hecho de que Rafa haya anunciado que no va a estar con este margen les sirve a todos para mentalizarse y entender esta nueva situación; han tenido tiempo, es una gran prueba para los demás. Hubiera sido distinto si él hubiera competido y a lo mejor pierde en octavos, por ejemplo, pero ahora el resto han entrado limpios en el torneo y sabiendo lo que hay. Eso es positivo.

P. Inevitablemente, todos los ojos se van hacia Alcaraz. ¿Está preparado para manejar la situación?

R. Está más que preparado, porque lo ha demostrado con creces. Tuvo la oportunidad de ser el número uno y lo consiguió, al ganar además su primer Grand Slam, y esta temporada ha logrado ponerse en forma rapidísimo pese a empezar más tarde que la mayoría; ha ganado trofeos, la gira sobre tierra ha sido brillante y el paso atrás en Roma ha sido importantísimo, pero en el buen sentido; creo que era necesario para que aflojase las máquinas y que recuperase energía.

Alcaraz tiene muchísima energía dentro, pero acordémonos de Rafa. Acabará controlándolo

P. ¿Qué porcentaje de su éxito depende del juego y cuánto de su mente?

R. Es una mezcla, porque tu juego es básico para que te lo puedas creer, y eso al final lo dirige tu mente. Creo que mentalmente, estos últimos días habrán sido un aprendizaje espectacular para él, pero no porque pudiera necesitar ninguna cura de humildad ni nada por el estilo, sino porque sencillamente le han puesto en situación y le han dicho que necesitaba parar. Lo necesitaba. La de Roma fue una derrota buenísima para él; ha rebajado las expectativas y ha cogido aire, porque el tanque va vaciándose y con esa parada él seguramente haya podido volver a llenarlo. Si está bien, creo que mentalmente va a poder controlar la situación, y en términos físicos, quizá se haya dado cuenta de que a cinco sets y en tierra, a lo mejor no hace falta que juegue todo el rato a piñón fijo, como si fuera un pura sangre…

Alcaraz devuelve la pelota durante el partido contra Cobolli.
Alcaraz devuelve la pelota durante el partido contra Cobolli.KAI PFAFFENBACH (REUTERS)

P. ¿Cómo se aprende a frenar siendo tan joven?

R. Eso te lo da la experiencia, y él tiene 20 años. ¿Que tiene un estilo? Claro que sí, y seguro que lo va a mantener, pero a partir de ahí probablemente vaya dándose cuenta de que con 4-1 y 40-0 a favor, a lo mejor no necesita ir como un loco a por una dejada y tirar después un willy [tiro por debajo de las piernas]… Tiene muchísima energía dentro, pero acordémonos de Rafa cuando era joven. Acabará controlándolo. Se lo pasa bien jugando, y eso es una ventaja muy grande.

P. Djokovic llega con perfil bajo. ¿Qué espera de él?

R. Si no está mal de ninguna lesión, que lo desconozco, por supuesto que va a ser uno de los más firmes candidatos. Es el que más experiencia tiene en el cuadro de largo, el único que ha sido capaz de ganar el torneo [junto con el suizo Stanislas Wawrinka], el que más grandes posee [igualado a 22 con Nadal] y generalmente suele ir de menos a más. En la gira de tierra no suele destacar muchísimo, salvo que acostumbraba a jugar bien en Madrid o Roma, y esta vez no ha sido así, pero independientemente de eso es capaz de ponerse en forma en pocos días y estará ahí; pasará por esos baches y esos enredos que suele sufrir, pero una vez que lo haga, estamos hablando de Djokovic… No podemos negar que su gira ha sido bastante pobre para un jugador de su nivel, y ves que quizá le falte un poco.

P. En condiciones normales, él sería el indiscutible favorito. ¿Se ha consolidado definitivamente el cambio?

R. Sí, está claro. Ya se ha abierto una nueva época. Quizá Novak no sea el máximo candidato, porque está jugando en una superficie en la que Alcaraz ha demostrado que puede hacerlo bien, como lo ha hecho Rune o incluso el mismo Medvedev… Y luego están ahí los Ruud, Tstitsipas o Rublev, que a lo mejor él los controla bastante más en otras superficies y en esta no tanto. Las diferencias en tierra son menores.

P. Hablando del producto femenino, ¿se cuida lo suficientemente bien? Últimamente, detalles feos en Madrid, Roma…

R. El tenis es uno de los deportes más ejemplares en este sentido, pese a todo lo que nos queda por hacer. No podemos poner el foco sobre un deporte que camina en la buena dirección, sino en otros órdenes de la vida en los que podemos mejorar. Hay camino por recorrer, pero hay que hacerlo de una forma que no genere un desgaste grande a las chicas porque ya bastante tienen con jugar, competir y entrenar. Toda la sociedad debe ayudar a que la desigualdad y todas estas cosas se vayan limando; es un deber de todos, no solo de las chicas.

Sabalenka celebra un punto contra Kostyuk.
Sabalenka celebra un punto contra Kostyuk.AFP7 vía Europa Press (AFP7 vía Europa Press)

P. Lucen ahí arriba Swiatek, Sabalenka, Rybakina. Hay extraordinarias jugadoras. ¿Qué falta para generar mayor atención? ¿Es una cuestión de carisma?

R. Llevamos tantos años en los que ha habido tanta variedad, tantas alternativas, que las que mandan ahora necesitan consolidarse de verdad para que la gente se las crea. Swiatek ha dado un paso adelante desde hace un par de temporadas, y Sabalenka y Rybakina necesitan certificar otra vez que van a ir a más, que van a estar ahí en París, luego en Londres y después en Nueva York. Parece que han llegado para quedarse, pero vamos a ver. Eso es lo que hará que los aficionados se identifiquen con ellas, y aplico esto al tenis masculino. Tú te identificas con alguien cuando se gana mucho, pero si hay mucha variedad es difícil. Hacen falta referentes, y no solo en el caso de las chicas.

Tú te identificas con alguien cuando se gana mucho. Hacen falta referentes, pero no solo en las chicas

P. Barty, Osaka, Muguruza, Anisimova, apartadas voluntariamente por la erosión mental; casos como el del alcoholismo de Pouille, Thiem y las lesiones, muchos proyectos frustrados… ¿Qué está fallando?

R. Partamos de la base de que los tenistas somos unos privilegiados. Ahora bien, el tenis es un deporte ultraexigente, extremadamente intenso y dificilísimo de gestionar desde que eres muy pequeño; eso no se ve, ni se nota si se entiende cuando lo dices, porque desde el exterior solo se ve el dinero que ganamos, y así es imposible poner en perspectiva otras situaciones. Lo que está sucediendo es el fiel reflejo de que este deporte, más allá de lo bonito que pueda ser, es a la vez una trituradora psicológica. Por mucho que tengas a un equipo detrás, tú eres el que debe gestionarlo todo. ¿Que es maravilloso? Sí, pero eso no quiere decir que el peaje que te exige sea enorme.

P. La rueda no para, proliferan los casos.

R. Sin ir más lejos, está ahí el ejemplo de Djokovic; juega en enero en Australia con la presión de tener que ganar el 22, luego no puede competir en Estados Unidos y después llega a la tierra como puede… Todo se acumula, y al final todo se convierte muchas veces en un calvario. Pero claro, dile tú a alguien que gana 1.000 o 1.500 euros al mes que esto que hacemos es muy complicado... Se trata de ponerlo todo en perspectiva para que la gente lo entienda y no te mande a la mierda, hablando claro. No creo que los tenistas seamos unos malditos ingratos, pero sencillamente el tenis te conduce hacia determinados límites psíquicos y físicos que no son fáciles de gestionar.

300 HORAS DE EMISIÓN EN DIRECTO

Eurosport ofecerá hasta el 11 de junio casi 300 horas de emisión en directo a través de sus canales (1 y 2) y su App. El canal cuenta con el análisis de los expertos nacionales e internacionales desde las instalaciones de Roland Garros y The Cube. Los aficionados pueden seguir toda la actualidad diaria del torneo parisino en el programa Pasando Bolas y tienen acceso a cada partido en las 16 pistas del complejo. La final individual femenina se retransmitirá en directo el sábado 10 de junio, a partir de las 14:30, y la final masculina el domingo 11 a la misma hora.

 

Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Alejandro Ciriza
Cubre la información de tenis desde 2015. Melbourne, París, Londres y Nueva York, su ruta anual. Escala en los Juegos Olímpicos de Tokio. Se incorporó a EL PAÍS en 2007 y previamente trabajó en Localia (deportes), Telecinco (informativos) y As (fútbol). Licenciado en Comunicación Audiovisual por la Universidad de Navarra. Autor de ‘¡Vamos, Rafa!’.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_