Benzema lleva más goles que 12 equipos de Primera
Solo el Valencia (11), Rayo (10) y Betis, Atlético y Real Sociedad (9) han sido más certeros ante la puerta contraria que el delantero francés
Avalado por sus tantos (8) y sus pases de gol (7) en las seis primeras jornadas de Liga, Karim Benzema se ha convertido en este comienzo de temporada en el delantero más prolífico de las cinco grandes campeonatos europeos (Liga, Premier, Bundesliga, Serie A y Ligue 1). Haaland (7/3) y Lewandowski (7/0), con un partido menos, le siguen en esta clasificación virtual, en la que Vinicius es cuarto (5/2). Mbappé, con un encuentro jugado más, se queda en cuatro y tres, respectivamente.
A nivel doméstico, la eficacia del 9 blanco también permite cualquier comparación. Suma más dianas que 12 equipos de Primera y lleva las mismas que el Barcelona y el Sevilla, que tienen un partido menos, por el aplazamiento del partido entre ellos. Solo el Valencia (11), Rayo (10) y Betis, Atlético y Real Sociedad (9) han sido más certeros ante la puerta contraria que el delantero francés.
En esta media docena de partidos, cuatro completos, solo ha dejado de jugar 11 minutos, lo que significa que ve puerta cada 66 minutos. Ha rematado 23 veces, 12 de ellas entre los tres palos. Seis de sus goles han sido con su pierna derecha, uno de penalti y dos de cabeza. Ha firmado en cuatro partidos con un triplete (Celta) y dos dobletes (Alavés y Mallorca) y uno contra el Valencia. Sus pases de gol se reparten en cinco encuentros, dos contra Levante y Mallorca y uno ante Celta, Betis y Valencia.
Pura estadística aparte, su influencia en el juego ofensivo del Real Madrid es máxima. Es la referencia absoluta. Se mueve por todo el frente del ataque. Se deja caer a las bandas. Baja al centro del campo para canalizar las transiciones. Crea espacios para sus compañeros. Organiza. Manda. Coloca. El auténtico líder dentro del campo.
Un Rayo de moda. Todo comienzo de curso tiene su equipo revelación y en el presente, el Rayo Vallecano es el opositor con más solvencia. Comenzó perdiendo los dos primeros partidos -en el primero se quedó con 10 por expulsión de su portero Luca Zidane a los 16 minutos- pero ha sumado diez puntos en los cuatro últimos con un empate y tres victorias consecutivas. La última en San Mamés (1-2) de las que revalorizan por la enjundia de un Athletic que llegaba lanzado.
En su estreno en Primera como técnico, Andoni Iraola está siendo fiel a sus principios. No se encierra atrás. Intenta tener el balón sin marearlo. Transiciones rápidas defensa-ataque. Buen repliegue. Atrevimiento en casi todos sus jugadores. Laterales largos (Balliu y Fran García) con llegada hasta la línea de fondo y un juego interior sólido con Comesaña y Trejo, escalonados, y con mucha presencia con el balón. Desde un clásico 1-4-2-3-1, el equipo ataca bien, 10 goles, solo superados por los 21 del líder Real Madrid y los 11 del Valencia y seis en contra. Muy buen balance si tenemos en cuenta que cuatro de ellos fueron en los dos primeros partidos.
En el último día de mercado se reforzó donde más falta le hacía. Arriba. Llegaron dos delanteros centros: Guardiola (1 gol) y Falcao (2) para competir con Nteka (1), a quien se le ha complicado la titularidad. Vallecas promete emociones fuertes.
El peligro de las rotaciones. Las semanas de tres jornadas de Liga suelen ser muy traicioneras. La mayoría de los entrenadores apuestan por las rotaciones masivas para controlar los minutos y el desgaste de sus presuntos titulares y no siempre las variantes salen bien. Por ejemplo, Marcelino, en el Athletic, realizó siete cambios en relación del partido contra el Atlético (0-0) al del Rayo (1-2). Solo mantuvo un jugador por línea: Unai, Lekue (cambiado de banda), Muniain y Raúl García. El rendimiento colectivo bajó considerablemente hasta el punto de que el técnico señaló públicamente que no le había gustado nada su equipo.
Luis García Plaza con su Mallorca en el Bernabéu también optó por una considerable rotación, aunque en su descarga tiene el atenuante de las lesiones en la línea defensiva. También siete cambios entre el partido con el Villarreal (0-0) y el del Real Madrid (6-1). Solo repitieron el portero Reina, Valjent, Oliván y Kubo. El técnico priorizó el partido de este fin de semana contra Osasuna. Lo pagó con una goleada.
El Asensio interior. Desde el comienzo del curso, Ancelotti, en los entrenamientos, llevaba probando a Asensio como centrocampista y en esa posición le había utilizado cada vez que había entrado en sustitución de un compañero. En los minutos que tuvo contra el Levante (31), Betis (24) y Celta (11), -contra el Alavés fueron apenas dos en el primer partido de Liga- el mallorquín siempre actuó de interior. Indistintamente a la derecha o a la izquierda. El martes, en su primera titularidad, su punto de partida fue el carril del ‘8′, aunque en muchos momentos, cuando su equipo atacaba, se convertía en una media punta convencional por detrás de Benzema.
Desde ese posicionamiento marcó tres goles, entró mucho en contacto con el balón y pareció sentirse cómodo fuera de la banda donde habitualmente era utilizado por Zidane. Harán falta más pruebas y, sobre todo, partidos más comprometidos en el aspecto defensivo para saber si Asensio puede reconvertirse en un interior de ida y vuelta. La competencia es mayúscula. Modric y Kroos parten desde la fijeza ganada a pulso. Valverde y Camavinga parecen sus recambios naturales… con lo que no le será fácil disponer de muchos minutos tampoco en esa demarcación. Asensio siempre ha manifestado que su puesto ideal es la media punta en un centro del campo en rombo (4-4-2), pero su equipo, de momento, no juega con ese sistema.
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