_
_
_
_

Nadal, del paseo al lapsus hacia octavos

El número dos embiste de inicio a Goffin, pero luego pierde un set (6-1, 6-3, 4-6 y 6-3, en 2h 49m). Alcanza junto a Federer (6-3, 6-1 y 7-6 a Ruud) el récord de presencias (14) en la 4ª ronda de París

Alejandro Ciriza
Nadal sirve durante el partido contra Goffin en París.
Nadal sirve durante el partido contra Goffin en París.Clive Brunskill (Getty)

Un divertido matrimonio belga se lo estaba pasando pipa, hasta que a los cinco minutos las cosas ya estaban claras. Ella (¡Allez David!) portaba una peluca roja, amarilla y negra, mientras que él había apostado por una graciosa gorra de la que salían dos cuernecillos y en la que se leía: Belgian Red Devils. Es David Goffin, su compatriota, un diablillo que recorre la pista como un correcaminos, con zancada eléctrica y un tenis revolucionado, pero claro, si enfrente está Rafael Nadal y el marco es la Chatrier todo eso importa bastante poco. A los cinco minutos, la libido tenística de la pareja ya había disminuido y los dos tenían un poco menos de guasa, porque para entonces el mallorquín ya había desmontado a su chico, aunque este demostrase su categoría arañándole un set.

6-1, 6-3, 4-6 y 6-3, en 2h 49m.

Más información
Al ritmo de Garbiñe
Pese a todo, “Serena siempre es Serena”

Bastó esa secuencia mínima, esos siete puntos consecutivos de entrada y los dos primeros juegos del partido en contra, para darse cuenta de que Goffin estaba sentenciado e iba a pasarlo mal, como los Yannicks de las dos primeras rondas. Para entonces, al matrimonio se le había perdido las risas, y ella ya se había quitado la peluca mientras a él le dio por hurgarse la nariz, a ver si de ahí dentro sacaba alguna idea para inspirar a su belga, que pese a todo tuvo un arrebato porque a diferencia de los alemanes él no es un sparring. Resistió loablemente el resto de la tarde, pero Nadal camina firme y llega a los octavos del torneo en una circunstancia casi ideal.

Casi, porque cuando los cronistas ya tenían los textos bien horneados, casi a punto, se produjo la noticia del día: ¡Extra, extra, Nadal ha perdido un set! Mal menor, nada serio parece. Como bien recuerda a los periodistas, tal es el nivel de exigencia cuando el examinado es él. Su listón es él mismo.

Correteaba y lo ponía todo Goffin, pero Nadal es demasiado superior en su retiro francés. Estrujó a su rival durante los 31 minutos que duró el primer parcial y lo dejó maltrecho (…que no finiquitado). Con 40/0, nada más arrancar el duelo y conforme calentaba más y más el sol de París, le clavó un aguijonazo con una devolución a bote pronto y una carrera de pura sangre para cazar la bola y hacerle el punto, viniéndole a decir que la puerta estaba cerrada (…que no fue del todo así).

Paso atrás: el resto y los primeros tiros del belga

La descarga fue salvaje y lo observaba desde el box de los Nadal el tío Toni, cruzado de brazos, sentado en la segunda fila junto a su hermano Sebastià. A buen seguro que le gustaba lo que estaba viendo, porque su sobrino vuelve a estar fuerte después de un periodo complicado y vuelve a figurar como el candidato principal, más allá de que Novak Djokovic asome por el horizonte como un lobo. Saboreaba cada golpe el número dos, resueltas las dos primeras mangas y en una dinámica muy similar la tercera. Sin embargo, luego vino el lapsus y la sorpresa, el pequeño bajón que no se esperaba y al achuchón de Goffin, subido a las barbas de Nadal durante unos juegos.

Le robó un saque y le birló el set, así que todo el mérito para el belga, guerrillero hasta la bola final. Goffin no es Hanfmann, ni Maden. “No ha sido para nada comparable a lo del otro día [con Maden]. He estado todo el rato concentrado al cien por cien, e intentando mantener la intensidad”, argumentó el número dos. “Hay que ser realistas, y el nivel al que he jugado durante los 45 minutos es muy difícil de mantener, porque es casi el máximo posible. Cuando juegas a un nivel tan alto, a la mínima que bajas un poco es una sensación extraña. En líneas generales he hecho un buen partido”, prolongaba el de Manacor.

Federer, 400 triunfos en los Grand Slams

“Jugaba contra un jugador que es muy bueno. Me he hecho el break en el momento clave y yo he cometido un error; a partir de ahí, nada que decir”, continuó. “Creo que en el 6-1, 2-0 y 0/30 ha cambiado un poco el partido. Él ha salvado ese juego cuando estaba en un momento crítico y yo estaba muy bien, y a partir de ahí ha sido más igualado. Con el saque y el primer tiro me ha generado demasiado daño”, había radiografiado unos instantes antes.

El último que había logrado ganarle un parcial en Roland Garros fue el argentino Diego Schwartzman, en los cuartos del año pasado. Fue un pequeño consuelo para Goffin, el premio a su rebeldía, pero Nadal hizo reset y se recompuso para citarse con Juan Ignacio Londero, de 25 años y 78 del mundo, debutante en un grande. El español y Roger Federer (6-3, 6-1 y 7-6 a Casper Ruud) progresaron y aterrizaron por decimocuarta vez en los octavos del major galo, superando las 13 ocasiones del estadounidense Budge Patty (entre 1946 y 1958).

El suizo, de paso, sumó su triunfo 400 en los Grand Slams y se convirtió en el octavofinalista más veterano en París (con 37 años y 305 días) desde Nicola Pietrangeli (38 y 267) en 1972.

RESULTADOS. VIERNES 31

CUADRO MASCULINO: Rafael Nadal, 6-1, 6-3, 4-6 y 6-3 a David Goffin; Benoit Paire, 6-2, 4-6, 7-6 y retirada de Pablo Carreño; Roger Federer, 6-3, 6-1 y 7-6 a Casper Ruud; Juan Ignacio Londero, 6-1, 6-3, 4-6 y 6-3 a Corentin Moutet; Kei Nishikori, 6-4, 6-7, 6-3, 4-6 y 8-6 a Laslo Djere; Martin Klizan, 7-6, 2-6, 6-3, 3-6 y 9-7 a Lucas Pouille.

CUADRO FEMENINO: Garbiñe Muguruza, doble 6-3 a Elina Svitolina; Marketa Vondrousova, doble 6-4 a Carla Suárez; Sloane Stephens, 6-3, 5-7 y 6-4 a Polona Hercog; Petra Martic, doble 6-3 a Karolina Pliskova; Madison Keys, 7-5, 5-7 y 6-3 a Priscilla Hon; Anastasija Sevastova, 6-7, 6-4 y 11-9 a Elise Mertens; Donna Vekic, 6-4 y 6-1 a Belinda Bencic.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Alejandro Ciriza
Cubre la información de tenis desde 2015. Melbourne, París, Londres y Nueva York, su ruta anual. Escala en los Juegos Olímpicos de Tokio. Se incorporó a EL PAÍS en 2007 y previamente trabajó en Localia (deportes), Telecinco (informativos) y As (fútbol). Licenciado en Comunicación Audiovisual por la Universidad de Navarra. Autor de ‘¡Vamos, Rafa!’.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_