_
_
_
_
_

El Barça y el reto que culmina el ‘boom’ femenino

Las azulgrana se estrenan en la final de la Champions ante el Lyon, que suma cinco títulos

Juan I. Irigoyen
Tojni Duggan, junto al entrenador Lluís Cortés.
Tojni Duggan, junto al entrenador Lluís Cortés.JOSEP LAGO (AFP)

El Barcelona masculino jugó su primera final de la vieja Copa de Europa en 1961. La moneda cayó en cruz en Berna: los palos negaron al Barça de Kubala. Tuvo que esperar 31 años el cuadro azulgrana para llevar la Orejona al Camp Nou. Entonces, Johan Cruyff reinaba en el banquillo. Este sábado (18.00, GOL) en la casa de Laszy y con la holandesa Lieke Martens como símbolo, el Barça femenino jugará su primera final de Champions en Budapest, un hito en la historia del fútbol y del deporte español. Redimir la memoria de Kubala, honrar el fútbol que impuso el Flaco, una cima para premiar el ascenso vertiginoso del fútbol femenino español ante el inmenso Olympique de Lyon.

Más información
Lieke Martens: “Intento imitar a Ronaldinho, pero no siempre me sale”
Marozsán: “Me encanta el estilo puro del fútbol español”

No existe un rival más duro que el francés. Cinco veces campeón de la Champions, otras dos finalista, se pasea por Europa con Ada Hegerberg, última Balón de Oro, dueña de un pegada única, con 24 goles en 28 partidos en la temporada. El problema, para el Barcelona, es que la noruega no está sola. La abultada cartera del Lyon —tiene ocho millones de presupuesto frente a los 3,5 del Barça— se permite contar con la calidad de Marozsán (en duda para el duelo de hoy), la vitalidad de Henry y la fuerza de Renard. Mezcla de furia y talento, el Olympique frenó a los cocos de la Champions, Chelsea (3-2 en el global) y Wolfsburgo (6-3), después de triturar al Avaldsnes (7-0) y al Ajax (11-0). Una máquina, ya conocida por el Barça. El curso pasado el cuadro francés echó a las azulgrana en los cuartos de final (3-1).

El poderío físico y goleador del Olympique contrasta con el toque y la seguridad defensiva del Barça y de su portera Paños con el balón. Es el equipo menos batido de la Champions (tres), encajados ante el débil BIIK Kazygurt en un despistado debut en Kazajistán. Un camino de ensueño, antes de la idílica final, impensada en el Barça, novel en el fútbol femenino profesional de máximo nivel.

Lluís Cortes, técnico del Barcelona, se anima: “No son invencibles”. El Barça reta a la utopía, con la memoria en Kubala y el fútbol de Cruyff.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Juan I. Irigoyen
Redactor especializado en el FC Barcelona y fútbol sudamericano. Ha desarrollado su carrera en EL PAÍS. Ha cubierto Mundial de fútbol, Copa América y Champions Femenina. Es licenciado en ADE, MBA en la Universidad Católica Argentina y Máster de Periodismo BCN-NY en la Universitat de Barcelona, en la que es profesor de Periodismo Deportivo.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_