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El Baskonia comienza con buen pie la Euroliga

Los de Pedro Martínez vencen al Zalgiris en Kaunas (79-87) tras despegarse en la segunda parte

Jon Rivas
Granger supera a Walkup
Granger supera a WalkupVALDA KALNINA (EFE)

Josean Querejeta tiene un sueño: que su equipo, el Baskonia, esté, allá por mayo, jugando la Final Four en Vitoria. Después de conseguir que el escenario de los partidos cumbre del baloncesto europeo sea la capital alavesa, el objetivo es que su equipo sea uno de los cuatro protagonistas del evento.

De momento empieza bien el largo camino hacia las finales. Queda muchísimo, lo reconocen los vitorianos. Pedro Martínez se pone la mano en la frente, mirando al horizonte, cuando se lo recuerdan. Restan miles de kilómetros por recorrer, infinitas canastas que anotar. Posiblemente, muchos sinsabores que afrontar, pero el primer paso lo dio el Baskonia en Kaunas, con un ejercicio de solvencia frente al Zalgiris, disminuido a última hora por la baja de su pívot, Antanas Kavaliauskas, que se quedó fuera apenas una hora antes de que comenzara el choque.

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El Baskonia se lo tomó muy en serio desde el principio. En el primer cuarto resistió a base de triples, el asedio del equipo lituano, muy bien en los lanzamientos de cerca, pero que no pudo encontrar caminos cómodos hacia los cañonazos de tres puntos. Cuatro triples del Baskonia mantuvieron a raya al Zalgiris, que acabó el primer cuarto con dos puntos de ventaja. Ya no volvería a dominar ningún parcial, porque Pedro Martínez ordenó apretar en defensa, y aunque en ataque tuvieron que seguir dependiendo de los triples, la entrada de Marcelinho Huertas asentó al equipo, que llegó al descanso con tres puntos de ventaja (39-42).

Tras la pausa, los vitorianos salieron aún más concentrados. Mientras el Zalgiris lo fiaba todo a la eficacia anotadora de Nate Wolters, que acabó el partido con 19 puntos, el Baskonia realizaba un esfuerzo coral, que se tradujo en una ventaja creciente según pasaban los minutos. La defensa estaba más ajustada; el ataque funcionaba mejor. El Baskonia corría bien al contragolpe y el Zalgiris acusaba el cansancio. Diop funcionaba como una máquina; Shengelia levitaba sobre el parqué. El tercer cuarto dejó claro la superioridad del Baskonia, que acabó con una ventaja de diez puntos, que aumentó hasta 17 a falta de seis minutos para el final del partido.

Solo un exceso de relajación podía ya poner en peligro la primera victoria del equipo vitoriano en la Euroliga. Apretó el Zalgiris, robó varios balones en los minutos finales, y acarició el sueño de vencer la resistencia visitante, pero todo se quedó ahí, en un marcador maquillado en los instantes finales después de un parcial de 8-0. La diferencia final fue justa. Ganó el Baskonia, que dominó el rebote, ofensivo y defensivo, y le comió la moral a un Zalgiris que solo aguantó medio partido.

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