El día que Rossi se negó a hacer las paces con Márquez
El piloto de Yamaha rehúsa estrechar la mano del campeón del mundo, con quien mantiene una tensa relación desde el gran premio de Malasia del 2015
De vuelta a las carreras, de vuelta a Misano, tierra dominada por el amarillo de los seguidores de Valentino Rossi, que reside a escasos kilómetros del circuito que acoge el gran premio de San Marino, Marc Márquez, su rival, a veces pareciera que también es su enemigo, silbado y abucheado en la parrilla y en el podio en este mismo escenario los últimos años, se esforzó por demostrar en una entrevista con una televisión italiana que tenía ganas de volver a llevarse bien con Il Dottore. “Ya he dicho que me gustaría tratar de resolver las cosas para evitar la tensión, y no tengo ningún problema en ofrecerle mi mano”, dijo el español, preguntado por aquellas declaraciones.
Al parecer, el piloto de Yamaha no siente la misma necesidad.
Así se pudo comprobar durante la conferencia de prensa oficial de este jueves. Con uno y otro sentados en el centro de la mesa, codo con codo. Bastó un gesto. Una media sonrisa, de esas que uno muestra cuando le cuesta contener el enfado. Y una negación doble: con la cabeza y con un no. Rotundo. Así fue el momento en que Rossi, brazos cruzados, se negó a hacer las paces con Márquez.
Y Márquez, pillo, listo, sonrió y volvió a tomar la palabra. “Las cosas son así, qué puedo decir, qué más puedo hacer. Es ya la segunda vez, pero, bueno, no hay ningún problema. Yo voy a seguir pilotando igual”. Rossi, consciente de la dimensión del momento, se acercó al micro: “Está todo bien, no es necesario que nos demos la mano. No hay ningún problema”.
Pero la imagen ya la había visto demasiada gente. Lo que el piloto italiano trataba de explicar con palabras lo desmentían sus gestos. No tiene ganas de hacer las paces con Márquez. Y mucho menos en público, con los fotógrafos preparados para inmortalizar el momento.
Su relación es mala, especialmente, desde aquel domingo en Sepang, el gran premio de Malasia del 2015, en que después de aguantar unas cuantas vueltas el acoso del de Honda, Rossi se enfrentó a él en la pista. Y Márquez acabó en el suelo, expulsado de la trazada por el italiano, que acabó perdiendo el Mundial en la última carrera del año en Valencia. Pasaron los años y, por mucho que se estrecharan la mano en el corralito, nada más bajarse de la moto, en aquel gran premio de Cataluña del 2016, apenas dos días después de la muerte de Luis Salom, la tensión siempre ha existido entre ellos. Y se disparó hace unos meses. En Argentina. Y después de una carrera en la que fue Rossi el que acabó en el suelo después de que Márquez, encendido en plena remontada, lo sacara de la pista al cometer un error en la frenada. “Está destrozando nuestro deporte”, dijo el de Yamaha.
Lorenzo: “Se equivocan; Rossi se ha comportado como un niño pequeño”
Si alguien sabe qué significa jugarse los cuartos con Valentino Rossi ese es Jorge Lorenzo, que fue su compañero durante años en Yamaha. Nunca se llevaron especialmente bien, ni siquiera ahora, pero existe la cordialidad. Desde esa posición, el mallorquín ofreció este jueves su opinión sobre lo sucedido: “Yo creo que se equivocan tanto el uno como el otro. Rossi, por no querer darle la mano a Márquez, por comportarse como un niño pequeño. Y sobre todo, porque tiene la oportunidad de transmitir a sus aficionados que no deben silbar en el podio a un piloto que no ha hecho nada para merecerlo”, se arrancó Lorenzo.
Y siguió: “Por otro lado, creo que a Márquez le importa demasiado lo que dice o hace Valentino. Debería seguir su rumbo y pasar de él. ¿Qué no le quiere saludar? Pues nada, a seguir por su camino, que pase de él y punto. Pero esa es solo mi opinión, y cada uno hace y dice lo que quiere”.
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