_
_
_
_
_

Piqué: “El Espanyol está desarraigado de Barcelona”

El central afirma que el club vecino “tiene un consejero chino, así que no hace falta que digan que son de China, España o Tabarnia”

Juan I. Irigoyen
Los jugadores del Espanyol discuten con los del Barcelona.
Los jugadores del Espanyol discuten con los del Barcelona.Alberto Estévez (EFE)

Hay partidos que, por vistosos, están destinados a ser recordados siempre; otros, en cambio, que por vulgares solo necesitan que el tiempo se encargue de borrarlos de la memoria. Y están los duelos que parecen escritos para un personaje. Un actor principal que por su fútbol o su actitud se lleva todos los focos. El empate entre Espanyol y el Barcelona será recordado por Piqué. Ni lo disputado del encuentro, ni la lluvia habían podido levantar la combustión en el derbi. Hasta que apareció el 3. Marcó. E imitó a Raúl en Cornellà. Como el delantero blanco en el Camp Nou en la temporada 1999-2000, el central mandó a callar al RCDE Stadium después de sellar el empate cuando faltaban ocho minutos para el final.

Más información
“Defenderemos a Piqué y Busquets porque no incitaron a la violencia”
El Espanyol pide que Antiviolencia investigue a Piqué, Busquets y los cánticos ofensivos en el Camp Nou

Entonces comenzó otro derbi. Un partido peleón, seguramente más nostálgico, indefectiblemente más hablado que jugado. Si Piqué fue el emblema del Barça, Gerard Moreno lo fue del Espanyol. Los dos canteranos, los dos goleadores, los dos enzarzados en un rifirrafe, símbolo de que todavía hay vida amateur en la vorágine del profesionalismo total. "Lo que pasa en el derbi se queda se queda en el derbi. Piqué me reprochó una entrada, que ha sido dura, pero como muchas. En los derbis hay tensión", dijo Moreno, que ayer le marcó su primer gol en Primera al Barça.

Lo que terminó en el derbi liguero había comenzado en la eliminatoria de Copa. Después de superar al cuadro blanquiazul en los cuartos de final, Piqué catalogó al Espanyol como "de Cornellà", en alusión a la localización del estadio inaugurado en 2009. Una frase que molestó al club blanquiazul, que denunció al central por "incentivar a la violencia". "Quien dude de dónde se fundó el Espanyol, que mire nuestro escudo", le había contestado Gerard Moreno. La paz, en su momento, la había intentado firmar Ernesto Valverde: "El Espanyol es de Barcelona, eso es así".

“Un jugador no puede callar a una afición”

Había en Cornellà pocos con el carácter y el carisma de Quique Sánchez Flores. El entrenador blanquiazul no dudó cuando se le inquirió por el gesto de Gerard Piqué en la celebración del gol. “Un jugador no puede silenciar a una afición y menos a la nuestra. Eso es imposible. Estamos muy por encima de eso, el Espanyol está por encima de eso”, espetó.

Puestos a hacer sociología, como trató de hacer el central del Barça, nada como revisar las palabras del técnico el día antes del partido. No quería calentar el derbi, pero tampoco es Quique de esos tipos que se muerde la lengua. Y teorizó sobre por qué resulta difícil ser del Espanyol en Barcelona. “Se vive avasallado por los medios de comunicación, en la calle... Nos hacen invisibles. La afición es gente que en algunas ocasiones se siente casi pisada”, denunció. Y concluyó: “El orgullo perico nos mantiene en alerta”. Ayer su equipo estuvo cerca de ganarle al Barça.

El técnico azulgrana, con pasado blanquiazul, no quería agitar el show alrededor del derbi. Tampoco consiguió apagarlo. La hinchada blanquiazul hace tiempo que tiene cruzado a Piqué, diana de sus insultos, algunos ofensivos con su familia. "No generalizo con toda la afición del Espanyol, sé que hay buena gente. Cuando una parte importante de la afición se pronuncia hacia mi persona, me da igual; pero, cuando lo hacen hacia mi familia o mis hijos, no. Y si no actúan ellos como club y en lugar de denunciarlo resulta que me denuncian a mí por decir que son de Cornellà, pues qué quieres que te diga: somos personas y actuamos como tal", se arrancó. Y añadía: "Sí, son de Cornellà, ya lo dije. Cada día están más desarraigados de Barcelona. Tienen un consejero chino, así que no hace falta que digan que son de China, Italia, España o Tabarnia. Lo que me dice la afición duele mucho y yo con esa frase intenté devolvérsela. Parece que ha funcionado, porque se han gastado una pasta", dijo en referencia a la publicidad que el Espanyol publicó en los medios justo antes del derbi.

Granero, formado en la cantera del Real Madrid, no dudó en responsabilizar al central de las fricciones en los últimos minutos. "Hasta el gesto de Piqué el partido fue muy limpio y modélico, luego más bronco. Cada uno es dueño de sus actos, pero cuando hay una provocación no se puede pedir respeto. Hay jugadores del Barça que son muy respetados aquí, como Iniesta", subrayó. "Son cosas que pasan en los derbis y se queden ahí. Espero que fuera esté todo tranquilo, que es lo que todos queremos", pidió el capitán azulgrana. Valverde también intentó relativizar la polémica. "El gesto de Piqué lo enmarco dentro de lo que fue la semana y la rivalidad", dijo el Txingurri.

Se terminaron los derbis este curso, no el contencioso Piqué-Espanyol. El 3 tiene un imán con el club blanquiazul, víctima de sus goles -es el equipo al que más dianas ha marcado, seis-, de sus gestos y declaraciones. El derbi de ayer se recordará con una paradoja: el bocazas Piqué mandó callar a la afición del Espanyol.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Juan I. Irigoyen
Redactor especializado en el FC Barcelona y fútbol sudamericano. Ha desarrollado su carrera en EL PAÍS. Ha cubierto Mundial de fútbol, Copa América y Champions Femenina. Es licenciado en ADE, MBA en la Universidad Católica Argentina y Máster de Periodismo BCN-NY en la Universitat de Barcelona, en la que es profesor de Periodismo Deportivo.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_