_
_
_
_

Támara Echegoyen: “Siempre pensé que algún día haría la Volvo”

La campeona olímpica participa a bordo del Mapfre en la primera edición de la vuelta al mundo a vela en la que todos los equipos compiten con tripulaciones mixtas

Támara Echegoyen durante la Fastnet Race en agosto de 2017.
Támara Echegoyen durante la Fastnet Race en agosto de 2017.UGO FONOLLA

Támara Echegoyen (Ourense, 1984), medalla de oro en la clase Elliott Match Race en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, y pentacampeona mundial, será la primera española en participar en la Volvo Ocean Race. La deportista gallega formará parte de la tripulación del equipo español Mapfre en la decimotercera edición de la vuelta al mundo a vela por etapas.

“La Volvo siempre estuvo en mi cabeza”, señala la regatista orensana que ha visto cumplido un sueño perseguido durante mucho tiempo. He acompañado en varias escalas a muchos amigos que han navegado en distintos barcos de la Volvo, y siempre que zarpaban, pensaba que "un día yo haría alguna de esas etapas". Participar en la regata es un reto personal “porque uno de mis objetivos siempre fue convertirme en una regatista muy completa”, dice Echegoyen, de 33 años.

La campeona olímpica tiene una larga experiencia en vela ligera, pero no en la oceánica. Son disciplinas totalmente diferentes, el cambio es radical y el proceso de formación y adaptación al nuevo barco ha requerido una preparación muy intensa, que aún continúa. Reconoce que no ha sido fácil, ambas especialidades requieren “trabajo y sacrificio” y recuerda que los cambios de barco han sido una constante en su carrera.

Támara Echegoyen

Ourense (España) / 17 de febrero de1984

Campeona olímpica Londres 2012 (Match Race)

Cinco veces campeona del mundo: 49er FX (2016), Match Race (2013) y Vaurien (2001, 2002 y 2005)

Medalla de Oro de la Real Orden del Mérito Deportivo (2013)

Premio Nacional del Deporte / Deportista revelación (2012)

La Volvo es una de las pruebas más extremas de la vela oceánica. Ocho meses de competición, 24 horas al día, siete días a la semana. Siete barcos –el Mapfre, de Xabi Fernández; el team AkzoNobel, de Simeon Tienpont; el Dongfeng Race Team, de Charles Caudrelier; el Vestas 11th Hour Racing, de Chaelie Enright; el Team Sun Hung Kai/Scallywag, de David Witt; el Turn the Tide on Plastic, de Dee Caffari y el Team Brunel, de Bouwe Bekking– participan en la edición de la vuelta al mundo a vela más larga de historia de la regata, que recorrerá cerca de 45.000 millas (83.000 kilómetros) y visitará 11 ciudades desde la salida hoy en Alicante hasta terminar en La Haya en junio. En 2017-2018 participarán en la prueba un total de 76 regatistas, entre ellos 18 mujeres y 58 hombres.

Apasionada del mar, la española se muestra ilusionada con este nuevo reto: “Es mi primera participación en la regata y hay muchos aspectos que desconozco”, dice la gallega para quien ha sido fundamental tener buenos maestros como sus compañeros de equipo para suplir su falta de experiencia.

Más mujeres

En 44 años de historia de la Volvo Ocean Race, anterior Whitbread Round the World Race, más de un centenar de mujeres se han embarcado en la regata formando parte de las tripulaciones. En la anterior edición en 2014-2015, el Team SCA supuso el regreso a la competición de una tripulación íntegramente femenina tras 10 años de ausencia.

Hace un año, la organización de la regata anunciaba un cambio importante en sus reglas para proporcionar a las mejores regatistas del mundo un camino mucho más despejado que les permita competir al máximo nivel de la vela oceánica. El primero de una serie de diez anuncios limitaba las tripulaciones masculinas de los equipos a siete miembros (uno menos que en la última edición), mientras que se daba ventaja numérica a las tripulaciones mixtas a través de una serie de combinaciones: 7 hombres y 1 o 2 mujeres; 7 mujeres y 1 o 2 hombres; 5 hombres y 5 mujeres y, por último, 11 mujeres. La deportista española valora la introducción de esta nueva regla y considera que es una gran oportunidad para mujeres regatistas que no tienen la experiencia suficiente para integrar un equipo de la Volvo.

 Incorporación al Mapfre

En este nuevo escenario la gallega se ganó un puesto en el Mapfre —el quinto proyecto de Pedro Campos en la vuelta al mundo a vela—, que a finales de julio apostó por la incorporación de dos mujeres a su tripulación aprovechando el cambio de las reglas. Con una configuración de siete hombres y dos mujeres, y Xabi Fernández como patrón, el equipo español incluye entre sus filas, además de Echegoyen —que será la primera española en participar en la vuelta al mundo a vela—, a la australiana nacionalizada estadounidense Sophie Ciszek, que ya compitió en la pasada edición en las filas del equipo femenino sueco SCA Team.

Echegoyen afronta el reto eludiendo el protagonismo de ser una pionera. “La verdad es que ser la primera española es algo anecdótico”, para mí es un orgullo poder llegar a formar parte de este equipo en el que, sea mujer o no, es muy complicado entrar”, señala. La gallega deja claro que lo único que espera de esta oportunidad es no ser la última española en participar en esta regata y que su presencia anime a más mujeres a trabajar y conseguir el nivel para que los equipos quieran llevar a más.

En 2014-2015, la regatista gallega ya lo intentó, quiso incorporarse al SCA, pero no fue seleccionada; además, era muy complicado compaginar la vuelta al mundo a vela con la campaña olímpica que había iniciado con Berta (Betanzos). Después de Río 2016, Xabi Fernández le propuso acercase a Sanxenxo (Pontevedra) para entrenar con el equipo; fue entonces cuando surgió la posibilidad de formar parte del Mapfre.

La Volvo es una regata muy exigente, con etapas muy largas donde navegas con todo tipo de condiciones. Reconoce que desde marzo han sido meses intensos de trabajo, pero está satisfecha con el resultado porque gracias a la ayuda de todos ha podido mejorar en este mundo tan nuevo para ella. Para el patrón del barco español, Echegoyen ha trabajado muy duro desde su incorporación y poco a poco ha ido cogiendo confianza. “La experiencia que le puede faltar en la vela oceánica lo suple con su talento”, señala, Xabi Fernández.

La regatista gallega, con una sonrisa permanente, es consciente de que a partir de ahora comienza lo más duro, pero está tranquila. "No estoy nada nerviosa -lo que no sé si es bueno o malo- pero sí un poco inquieta por salir", declaraba 24 horas antes de la salida. Sabe que va en un barco, -donde la mayor parte del grupo ya eran sus amigos antes- con gente muy experimentada, excepcionales regatistas en los que confía plenamente. Respecto a las opciones de ganar, se muestra prudente: “Somos realistas y sabemos que tenemos un buen equipo, pero también hay otros a los que batir, y eso es lo emocionante”, Es verdad que el equipo es muy competitivo y ya ha demostrado que puede hacer un buen papel.

Finalmente, la campeona olímpica no esconde su deseo de poder estar en Tokio 2020: “Primero hay que esperar a terminar la VOR, pero me apasiona la vela y los Juegos los tengo en la cabeza porque aún tengo la suficiente llama para luchar por ellos”, señalaba la deportista.

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_