El baloncesto 3x3 y los relevos mixtos en atletismo y triatlón serán olímpicos en Tokio 2020

El Comité Olímpico Internacional dio un giro a su programa para los próximos Juegos de Tokio 2020 en los que introducirá deportes de más reciente creación y que suelen practicarse en espacios urbanos. Apostará también por una cita en la que se reforzará significativamente la participación de las mujeres. Los últimos deportes que se incorporan al programa olímpico son el baloncesto 3x3 y los relevos mixtos en atletismo y triatlón. De esta forma, se profundiza en la nueva línea emprendida el año pasado cuando se dio vía libre para que en Tokio se incluyan deportes como la escalada, el kárate, el béisbol, el monopatín y el surf. Al mismo tiempo, el COI ha anunciado que se reducirá el número total de participantes que se darán cita en los Juegos.

“La admisión de las nuevas y apasionantes pruebas que hemos aprobado ahora, además de los cinco deportes que ya se introdujeron el año pasado para Tokio 2020, constituyen un gran cambio en el programa olímpico”, manifestó el presidente del COI, Thomas Bach. “Estoy encantado de que los Juegos sean más jóvenes, más urbanos y con más participación femenina”. En Tokio se añaden 15 pruebas al programa olímpico, se disminuirá la participación total en 285 deportistas respecto a la que se dio el año pasado en Río de Janeiro y se doblará el número de pruebas mixtas, 18 en Japón y 9 en Brasil.

El Comité Ejecutivo propondrá en la próxima asamblea general del COI que las sedes de los Juegos de 2024 y 2028 se designen a la vez, en la cumbre que tendrá lugar en Lima en septiembre. Se trata de una decisión de enorme importancia. Por una parte se refuerzan las posibilidades de las dos únicas ciudades que han presentado su candidatura a ser sede de la cita de 2024, París y Los Ángeles, ya que se da por supuesto que con una elección para las dos ediciones, la primera descartada se asegurará su designación para la cita de 2028.

De esa manera el COI esquiva también el problema que supone que cada vez menos ciudades se animen a presentar su candidatura, presuntamente porque se ha reforzado la percepción de que pueden acarrear más problemas y dificultades económicas que beneficios para las ciudades que los organizan. La última experiencia de Río de Janeiro en ese sentido ha sido negativa. París ya fue sede los Juegos en 1900 y 1924 y Los Ángeles, en 1932 y 1984.