El tatuador de Lionel Messi explica el nuevo diseño del astro
“Vuelve hecho un guerrero maorí”, dice Roberto López, encargado de dibujar la pierna izquierda del 10
Lionel Messi nació en 1987, con lo cual, podría considerarse un millenial; incluso, muchas veces se comporta como uno. El 10 culé parece canalizar cada cambio en su vida personal con la alteración de su estilo y en esa búsqueda parecen ser los tatuajes su afición favorita. Antes de disputar la Copa América Centenario, Lionel eligió una gama de diseños y se puso en las manos de Roberto López, un tatuador que vive en la ciudad de Mar del Plata (a 404 km de Buenos Aires) y que viaja especialmente a Barcelona cada vez que el futbolista lo requiere. La renuncia a la selección argentina trajo consigo el cambio del color de pelo y este nuevo regreso está acompañado por otra estampa en su piel.
“Me pidió una pata negra”, aclara a EL PAÍS el artista principal de la casa Eikeel Tattoo para explicar la forma en la que el jugador eligió taparse los tatuajes que tenía anteriormente, una pelota, un 10, un par de alas, unas flores, dagas y las manos de Thiago, su hijo mayor. “Nunca estuvo conforme con lo que tenía antes. Estaba bien planteado lo que quería pero fue pasando por diversos colegas que no ensamblaron todos esos estilos distintos de tatuajes”, explica López.
El ilustrador aclara que el diseño que se conoció en el último entrenamiento de la selección en Belo Horizonte, lugar donde este jueves enfrentará a Brasil, no es la versión definitiva aunque no quiso dar pistas sobre lo que viene. “Es una sorpresa como termina”, expresa. El nuevo encuentro entre López y Messi fue hace unos 10 días, en Barcelona: “En total estuve un mes por allá. Llegué a Barcelona y tatué a Leo, luego empezamos una gira por Valencia, donde atendí a Enzo Pérez; Florencia, a Mauro Zárate, el uruguayo Matías Vecino y el mexicano Carlos Salcedo; Sevilla, con Matías Kranevitter, Joaquín Correa y sus respectivas novias y el capitán Vicente Iborra. Vuelvo antes de fin de año para terminárselo pero queda sujeto a la agenda de Lionel”. La visita del rosarino a sus pagos para pasar las fiestas de fin de año podría ser otra excusa para terminar el trabajo.
“Con el diseño negro mató dos pájaros de un tiro”, advierte el artista, “Porque además de taparse los diseños anteriores que no le gustaban, demuestra que está volviendo como un guerrero maorí, que siempre quiere ganar todo. Antes lo levantaban a patadas y no decía nada, ahora responde, se lo ve más maduro y no se deja atropellar”.
La técnica que López utilizó en Messi se denomina Blackwork, Blackfull o simplemente, Blackout Tattoo y consiste en teñir de negro una parte de la piel. La pionera en Argentina de esta moda es Candelaria Tinelli, hija del animador televisivo más exitoso, Marcelo Tinelli. Con la novedad a la vista de todos no faltaron los que alertaron sobre la salud del astro. Incluso, el dermatólogo Will Kirby, especializado en eliminación de tatuajes, dijo a la revista Women's Health que, “actualmente los artistas mezclan diferentes tintas, y un tatuaje completamente negro, que parece que solo se compone de tinta a base de carbono, puede en realidad incluir ingredientes dañinos”.
“No es peligroso”, responde el tatuador de Messi, “Imaginate que hay gente que está tatuada de pies a cabeza. Lionel, además, juega con medias largas y sólo se expone en verano pero es bastante cuidadoso, se pone mucho protector. Para una persona más sedentaria, tatuarse en exceso puede ser peligroso, porque el organismo tarda mucho más en digerir la tinta pero en la piel de un deportista del nivel de Leo, el tatuaje cura más rápido y asimila a otra velocidad”.
“El tatuaje negro viene de una raíz histórica que tiene que ver con los guerreros maoríes de Oceanía, está de moda aún en casos en los que no hay necesidad de tapar ningún diseño anterior y me lo piden mucho. Es la vanguardia”, finaliza López. Sólo faltaba que lo haga Messi para que la vanguardia pase a ser algo establecido.
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