“Contra Federer sólo pienso en disfrutar”

“Contra Federer sólo pienso en disfrutar, en hacerlo lo mejor posible”, declaró el domingo por la noche el español Roberto Bautista tras alcanzar la cuarta ronda del Open de Estados Unidos. Su satisfacción está más que justificada: el castellonense, de 26 años, es uno de los jugadores del circuito que mejor progresión ha tenido en la dos últimas temporadas. Desde que entró en el Top 100 en agosto de 2012 se ha colocado entre los 20 primeros (ahora ocupa el puesto 19) y este año ha sumado sus dos primeras victorias del circuito, una sobre hierba en junio (el Topshelf Open de s-Hertogenbosch, en Holanda) y otra sobre tierra en julio (Stuttgart). Para celebrarlo, nada como su primer partido de hoy contra el mejor tenista de todos los tiempos y en la pista central de Nueva York, una de las catedrales del tenis mundial. La eliminación en la noche del lunes del otro español superviviente en el cuadro, Tommy Robredo, otorga al partido un valor especial.

Bautista comienza a ser temido entre la élite. Su capacidad para rendir sobre superficies distintas es muy valiosa en un circuito muy exigente y cambiante. Lo comentó el propio Federer tras derrotar a otro español, Marcel Granollers. “Nunca he jugado con Bautista, pero sé que lo está haciendo muy bien. ¿No ha ganado dos torneos este año en superficies diferentes?”, preguntó el suizo. “Es muy rápido y consistente. Viene de la escuela española, así que será muy sólido y duro. Nunca se cansan. Pelean punto a punto, siempre están ahí, muy fuertes mentalmente. Además, no es el típico español que lifta mucho la bola. Juega increíblemente plano, algo muy sorprendente en ellos. Estoy deseando que llegue el partido”, añadió.

Admirador de Ferrer, en Australia alcanzó la cuarta ronda y en París y Londres llegó hasta la tercera

Bautista, además de sus dos títulos ganados, ha tenido también su mejor año en los torneos del Grand Slam. En Australia alcanzó también la cuarta ronda tras derrotar al argentino Juan Martín del Potro. En Roland Garros y Wimbledon llegó a tercera ronda. En ellas perdió con el checo Tomas Berdych (7 del mundo) y el británico Andy Murray (9), respectivamente. Pase lo que pase con Federer, Bautista sin duda mejorará su posición en la clasificación. De momento, es el cuarto mejor español, situado tras Nadal, Ferrer y Robredo, pero, dado que el año pasado, en su debut en Nueva York, se quedó en segunda ronda, en esta ocasión sumará puntos que le permitirán avanzar posiciones. De seguir con esta progresión en lo que queda de temporada, con la gira asiática a la vuelta de la esquina, podría asomarse a los balcones del top 10.

No es el típico español que lifta mucho la bola. Juega increíblemente plano. Es sorprendente"

Sobre el cemento de Nueva York, su condiciones y su inteligencia táctica están dando resultados. En el partido de tercera ronda contra el francés Adrián Mannarino sufrió un primer set muy igualado (7-5). Pero llegó la lluvia. “En el vestuario analicé lo que estaba haciendo mal y decidí cambiar algunas cosas. Me sentó muy bien ese parón”. En la reanudación, el castellonense resolvió por la vía rápida: 6-3 y 6-2. Hasta el momento, Bautista sólo tuvo problemas el primer día, con el austriaco Andreas Haider-Maurer, con el que tuvo que emplearse a cinco sets. La primera jornada, sobre todo para los novatos como él (este es su segundo Abierto de Estados Unidos) es muy complicada: calor, humedad, ruido, partidos nocturnos… Su siguiente duelo, con el jugador local Tim Smyczek fue coser y cantar, a pesar de que la grada se empleó a fondo con su hombre.

Bautista nunca ha ocultado su admiración por David Ferrer, su modelo a seguir. Hoy, ante Federer, afronta un duelo especial. Con Nadal ausente por lesión, Ferrer eliminado por agotamiento y el resto de la armada diezmada (Tommy Robredo, el otro español superviviente en Nueva York, no había concluido su partido contra el suizo Stan Wawrinka al cierre de esta edición), el tenis español tiene en Bautista una baza a la que aferrarse.

El Arthur Ashe Stadium tiene la palabra, sobre todo después de la eliminación el lunes por la noche de Tommy Robredo, el otro español superviviente, ante el suizo Stan Wawrinka (7-5, 4-6- 7-6 y 6-2). El partido fue muy intenso e igualado, en ocasiones tenso (un mal gesto de Wawrinka en el cuarto set provocó una pequeña discusión entre los dos jugadores). Robredo es un jugador muy duro y su juego siempre ha resultado difícil de descifrar para Wawrinka, al que ha ganado en seis ocasiones de ocho enfrentamientos.

Cada punto se disputó al límite y la victoria pudo haber caído de cualquier lado. Sin embargo, en el tie break del tercer set se produjo la selección final. Robredo desperdició dos bolas de set con todo a su favor, lo que permitió la recuperación de su rival, aparentemente tocado por una caída. Con la tercera manga en el bolsillo, y después de más de dos horas de partido, la cuarta fue un trámite para el suizo. “El partido se me ha escapado por dos puntos. Ha sido un enfrentamiento muy duro, con momentos de muy buen tenis”, explicó Robredo, que atribuyó a los nervios de su rival el encontronazo del cuarto set. “Tal vez pensaba que le iba a resultar más fácil y estaba molesto por no controlar el partido, pero no tiene importancia”, declaró el español.