Sainz y Moya arrancan de nuevo

Pocas parejas del deporte español resisten la comparación con Carlos Sainz, piloto, y Luis Moya, copiloto del primero durante 14 años. Sainz y Moya, dos veces campeones del Mundial de Rallies y uno de los tándem más populares de España durante los años noventa, vuelven hoy a competir juntos. Diez años después de que se separaran sus caminos deportivos, seis de que Luis Moya se sentara por última vez a la derecha de Carlos Sainz en un coche (en el Rally de Shalymar de 2006, disputado en la Comunidad de Madrid), Sainz, que ahora tiene 49 años, y Moya, 51, arrancan de nuevo. Competirán hasta el sábado en la cuarta edición del Rally de España Histórico, prueba que puntúa para el Campeonato de Europa de la especialidad. Una pareja histórica conduciendo un coche legendario, el Porsche 911 grupo 4 de 1981, desde el Palacio Real de Madrid hasta las puertas de Ávila.

He tenido que tomar alguna biodramina para no marearme”

Luis Moya

Ambos están muy motivados por el regreso: Sainz ha dicho sentirse “ilusionado por volver a correr con Luis Moya”, y el copiloto asegura que se encuentra “ansioso” por tomar la salida. En cambio, existen más dudas sobre su estado de forma actual, generadas (y luego parcialmente disipadas) por el propio Luis Moya. “He tenido que tomar alguna biodramina para no marearme”, declaró al finalizar los entrenamientos. “En carrera, ya con la adrenalina, no creo que vaya a acordarme de los mareos”, matizó.

Sobre la capacidad competitiva de los dos hay más debate del que sugiere un vistazo a su palmarés. Sainz y Moya formaron pareja deportiva durante 14 años, entre 1988 y 1992, en los que ganaron dos campeonatos mundiales (en 1990 y 1992) y 24 pruebas del Mundial de Rallies. Carlos Sainz es el segundo en la clasificación histórica de pilotos del Mundial, solo superado por el campeón de las ocho últimas ediciones, Sébastien Loeb, y el tercero en número de victorias. Casi todo lo consiguió Sainz con Moya a su derecha.

A pesar del incuestionable éxito alcanzado por Sainz y Moya, la pareja perdura en el recuerdo de muchos aficionados como un dúo gafado, una especie de Poulidor del motor, siempre a un palmo del éxito. Más que los cuatro subcampeonatos y los cinco terceros puestos alcanzados en su carrera pesa una imagen icónica, aquella de Luis Moya desesperado, pidiendo, rogando e implorando a Carlos Sainz que arrancara el motor del Toyota Corolla, a 500 metros de la meta del Rally de Gran Bretaña de 1998 y su tercer campeonato mundial de rallies. “¡Trata de arrancarlo Carlos! ¡Trata de arrancarlo!...¡Trata de arrancarlo, por Dios!”, grita Moya en esa secuencia. Pero allí se quedaron, parados, sin poder salvar ese medio kilómetro por culpa de un motor que no arrancó. Su sociedad se disolvió cuatro años después, al término del Rally de Gran Bretaña de 2002.

El camino de Carlos Sainz se separó del de Luis Moya hace 10 años, pero se mantuvo pegado al motor. Sainz se retiró oficialmente del Mundial en 2004 (aunque disputó otras dos pruebas en 2005) y añadió otro hito histórico a su carrera en 2010, cuando se convirtió en el primer español en ganar el Rally Dakar en la categoría de coches. Entre medias, optó a la vicepresidencia del Real Madrid presentando una candidatura conjunta con el empresario Juan Miguel Villar Mir, en 2006. Luis Moya asumió la dirección deportiva del Nuple Global Racing en 2010, aunque abandonó un año después. Los caminos de Carlos Sainz y Luis Moya, su fiel escudero, vuelven a juntarse 10 años después. Una pareja histórica, ahora en las carreteras de Madrid a Ávila.