"Teníamos ritmo para ganar y lo hicimos"
Fernando Alonso celebra la primera victoria del año en un circuito tan especial para Ferrari como el de Silverstone
Fernando Alonso estaba emocionado. No es habitual en él, que ha sobrevivido a todo tipo de circunstancias en la fórmula 1. Pero ganar en un circuito tan especial como el de Silverstone resulta muy gratificante para cualquier piloto. Y más si la victoria se produce en una fecha tan señalada para la escudería Ferrari, que celebraba ayer su primera victoria en el circuito británico hace ahora 60 años. "Por la mañana había corrido con el coche que ganó entonces. Y por la tarde conseguía mi primera victoria del año. Estoy muy contento", dijo el doble campeón mundial.
No fue una carrera fácil. Comenzó con el piso muy mojado en algunos sectores, lo que obligó a todos los equipos a montar los neumáticos intermedios. Algo con lo que nadie contaba y que cambió todas las estrategias. Alonso salió bien, igual que Vettel que tomó el liderato de la carrera por delante de su compañero Webber. El asturiano era tercero y estaba ya en posiciones de podio. Pero luego, en el segundo cambio de neumáticos, la carrera dio un vuelco, cuando Red Bull tuvo un problema con la rueda trasera izquierda del coche de Vettel.
"Habíamos entrado prácticamente juntos y vi el problema en el taller de Red Bull", confesó Alonso. "Sin embargo, no sabía qué iba a ocurrir. Estaba claro que salía por delante de Vettel. Y entonces me vi liderando la carrera y con muchas posibilidades de ganarla, como al final ocurrió". El Ferrari de Alonso funcionó ya con los neumáticos intermedios de lluvia en las primeras vueltas. Pero luego, el asturiano sufrió con los blandos porque le costó darles temperatura. "Entonces Hamilton me pasó muy fácil y me dejó cuarto. Pero cuando los neumáticos cogieron temperatura, el coche funcionó perfecto y vi que teníamos ritmo para luchar por la victoria", prosiguió Alonso. "La cuestión era mantener el coche en pista, no cometer errores".
Superado Hamilton, Alonso pudo lanzarse esta vez al ataque de los Red Bull. "Sí, mi ritmo era incluso mejor que el suyo. Y a partir de ahora todas las carreras van a ser muy parecidas. Vettel acaba siempre primera o segundo. Por tanto, lo único que podemos hacer es intentar superarle". Alonso sumó 25 puntos y se coloca ahora a 92 de Vettel, tras nueve carreras disputadas. Faltan todavía 10 y, por tanto, hay 250 puntos en juego. Pero restárselos a Vettel no será fácil, porque el alemán está demostrando una solidez endiablada, que le ha permitido ganar seis carreras y ser segundo en las tres restantes.
"No fui suficientemente agresivo", comentó Vettel, que luchó por la victoria hasta el final a pesar de la pérdida de adherencia por el mal estado de sus neumáticos en la última parte de la carrera. "Es evidente que hicimos algunas cosas mal y debemos aceptar que Ferrari ha dado un paso adelante muy importante y que nos ha superado en esta carrera. Son muy fuertes. No podemos dormirnos si queremos seguir ganando". Su compañero de equipo, Mark Webber, evitó cualquier polémica cuando le preguntaron sobre qué ocurrió en la última vuelta, cuando estaba atacando a Vettel y recibió la orden de alejarse de él. "Los dos teníamos los neumáticos muy gastados y no pude adelantarle", se limitó a decir.
La carrera evidenció que las evoluciones de Ferrari han permitido al equipo de Maranello dar a Alonso un coche ganador. "Hace tres carreras estábamos a 1,5 segundos y ahora les hemos ganado. La recuperación del equipo ha sido perfecta. Y espero que en las próximas carreras esto vuelva a repetirse", concluyó Alonso.
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