Agónica victoria de De Clercq

Cuando el belga Bart De Clercq (Omega Pharma-Lotto) ha encarado el último kilómetro, nada hacía presagiar un final tan apretado como el que se ha producido. Llegaba con más de 20 segundos de ventaja sobre el resto del pelotón, pero los 17 kilómetros de subida al santuario de Montevergine han mermado sus fuerzas y, en un final de etapa inesperadamente apretado, ha llegado el primero a la meta, pero prácticamente al mismo tiempo que sus perseguidores. Segundo ha sido Scarponi (Lampre) y tercero Kreuziger (Astana). Es la primera victoria profesional de este joven escalador, que a los 24 años corre su primer Giro. El holandés Weening (Rabobank) ha conservado el liderato en la clasificación general.

El Giro ha celebrado la llegada al tercio de la competición con la primera etapa de alta montaña, con dos puertos de segunda categoría, y la primera llegada en alto. Con la línea de meta en Montevergine de Mercogliano, a 1.265 metros de altitud, la jornada de hoy, sin ser determinante, debía servir para empezar a despejar dudas sobre los candidatos definitivos a ganar la corsa rosa. Sin ir más lejos, Alberto Contador advertía ayer, nada más llegar a Fiuggi, que en esta jornada se vería "quién va bien, pero sobre todo los que van mal". No ha habido grandes sorpresas. Llegaban los favoritos en condiciones de gran igualdad y de la misma forma han acabado, midiéndose los unos a los otros, sin decidirse a atacar.

Los 110 kilómetros hacían de esta etapa la más corta de toda la prueba -exceptuando las cronometradas- y hacían prever una carrera tensa, en la que se impusiera un ritmo rápido desde el principio. Así ha sido. Visconti (Farnese), Pineau (Quickstep), Montaguti (AG2R), Canuti (Colnago) y Bak (HTC) han formado un grupo de escapados que ha llegado al paso de Roccabascerana con algo más de tres minutos de ventaja sobre un pelotón del que tiraba el Acqua & Sapone en bloque.

Y, prácticamente en la misma situación, se ha llegado a la Serra della Strada, primer puerto de segunda categoría en lo que va de Giro. Ha sido el momento en el que todo el protagonismo ha ido a parar a un espectacular Johnny Hoogerland (Vancansoleil). En el día de su 28 cumpleaños, el holandés se ha escapado del pelotón con un tremendo arranque de fuerza y ha acabado dando alcance a los escapados a 25 kilómetros de la meta, cuando se acercaban a los 17 kilómetros de escalada al 5% de media que ponían fin a la etapa.

A esa subida de Montevergine de Mercogliano se ha llegado con el pelotón recortando distancia a pasos agigantados. El primero en ser absorbido ha sido Visconti, el campeón italiano, que luce el dorsal 150 en honor del aniversario de la unificación de su país. Para entonces, la ventaja de los otros cuatro escapados era ya de menos de medio minuto. Solo Bak ha sido capaz de mantenerse adelantado durante unos pocos kilómetros, pero varios ataques individuales han acabado por dejarle fuera de juego. Era el momento de De Clercq, que ha abierto hueco de forma sorprendente. En una magnífica arrancada, ha aprovechado un tramo lleno de curvas para llegar a sacarle más de 30 segundos al pelotón. Este ha medido mal las fuerzas del belga y ha atacado tarde. En el último momento, sin embargo, De Clercq ha estado cerca de echar por tierra su magnífica exhibición. En unos últimos segundos apasionantes, en los que no ha apretado cuando el resto de corredores se le echaba encima, ha cruzado el primero la meta en un final de photofinish. Una primera victoria, agónica, para no olvidar.