Los Grizzlies, de festival en festival

Los Grizzlies de Marc Gasol no paran de asombrar. Daba la sensación de que tenían todas las de perder en su tercer partido ante Oklahoma. Llegaron a acumular una desventaja de 16 puntos y seguían 11 por detrás cerca del ecuador del último cuarto, pero acabaron forzando la prórroga y vencieron por 101-93. Dominan la serie por 2-1 y, al igual que hicieron en la anterior ante los Spurs de San Antonio, han logrado revertir el factor cancha.

El partido no empezó bien para el equipo de Memphis. Randolph no parecía a gusto y Lionel Hollins dio bastantes minutos al pívot iraní Haddadi, que aprovechó muy bien la oportunidad. Pero a los Grizzlies les costó atar en corto a Durant, a Westbrook y a Ibaka y llegaron a perder por 70-54. A partir de ahí empezó la remontada, con un monumental mate de Young y un par de triples consecutivos de Mayo y Conley. Randolph se entonó y Marc Gasol mantuvo su superioridad bajo los aros. Los Thunder acusaron el nuevo susto que se llevó Ibaka, que volvió a lastimarse en la pierna izquierda. El pívot congoleño volvió a la cancha pero perdió el hilo.

Último cuarto demoledor

El último cuarto fue demoledor para los Thunder, que solo anotaron 10 puntos. En los últimos siete minutos y medios solo anotaron cuatro puntos. Los Grizzlies pudieron ganar sin la necesidad de una prórroga pero fallaron hasta tres tiros libres en los últimos instantes. Conley y Westbrook anotaron los últimos puntos de sus respectivos equipos y Durant y Randolph fallaron los dos últimos tiros, que dejaron el partido en un empate a 86 que dio paso a la prórroga. En ella, los Thunder continuaron sin anotar hasta que transcurrieron dos minutos y medio y los Grizzlies controlaron con relativa comodidad.

Randolph, 21 puntos y 21 rebotes

Randolph sumó 21 puntos y otros tantos rebotes, Marc Gasol logró 16 puntos, tres de ellos en los instantes finales, además de 7 rebotes y 2 asistencias. Conley y Mayo lograron 18 puntos cada uno. Por los Thunder, Durant consiguió 22 puntos y 12 rebotes aunque su serie en el tiro fue pobre: 10 de 24. Lo mismo le sucedió a Westbrook, que consiguió 22 puntos, con una serie de 7 de 22. Ibaka aportó 14 puntos, 8 rebotes y 6 tapones. Los Grizzlies están ahora bien situados para lograr lo que ningún equipo antes ha logrado en la NBA: meterse en la final de una Conferencia después de haber concluido en la octava plaza en la fase regular.

Susto para Rondo

Los Celtics barrieron a Miami por 97-81. El partido estuvo presidido por el enorme susto que dio Rajon Rondo. Con 60-50 en el marcador, y en un forcejeo con Wade, el base de los Celtics cayó en mala postura y se produjo una luxación del brazo izquierdo. La lesión parecía importante. Sin embargo, Rondo regresó del vestuario solo unos minutos después y se reintegró a un partido en que el que su equipo estuvo mucho mejor que los Heat.

Enorme Garnett

Garnett estuvo espléndido con 28 puntos y 18 rebotes y Pierce le acompañó con 27 puntos. Rondo concluyó con 6 puntos y 11 asistencias. Pero si dominaron los Celtics fue sobre todo porque lograron ahogar en defensa a LeBron James y Chris Bosh. LeBron concluyó con 15 puntos, con 6 de 16 en su serie de lanzamientos, y Bosh solo logró 6 puntos, con 1 de 6. Los 23 puntos de Wade y la buena aportación desde el banquillo de Anthony, con 12 puntos y 11 rebotes, y de Chalmers, con 17 puntos, no fueron suficiente para el equipo de Miami.

El embrollo de Jackson y Gasol

La concentración de la plantilla de los Lakers en Dallas es un polvorín. La tensión que se palpó durante la tercera derrota ante Dallas no parece conformar el mejor ambiente para intentar una remontada que ningún equipo ha logrado en la historia de la NBA. Pau Gasol está en el centro del huracán después del par de broncas que le dedicó Phil Jackson en sendos tiempos muertos. Los periodistas afilaron sus preguntas tras el partido.

"Todos los que cubrimos tus partidos desde hace tiempo creemos que no pareces el mismo. ¿Qué crees que te pasa?", le preguntaron. "Simplemente no soy capaz de ser efectivo. No he sido capaz de sentirme a gusto en la cancha". ¿Qué es lo que te hace no estar a gusto?, prosiguieron. "Para ser sincero nada de lo que ellos están haciendo. No es la primera vez que juego este tipo de partidos".

La frustración de Pau

Sobre el grado de responsabilidad que tiene, Pau admitió: "No sé cuánto. Pero definitivamente no me gusta y estoy sorprendido por el hecho de no estar jugando tan bien como pienso que debería hacerlo". Le insistieron en que describiera el grado de tensión que debe soportar. El pívot español lo intentó: "Obviamente cuando no estás jugando como quisieras, es frustrante. Pero debes intentar ser más decisivo en la cancha".

Phil Jackson prefirió omitir cualquier tipo de respuesta relacionada con la tensión que se vivió en el banquillo y sus regañinas a Gasol y también a Bynum. Este dijo que en ocasiones no comparte el punto de vista de su entrenador en determinadas situaciones del juego.

Kobe, optimista

Kobe Bryant, que se mantuvo un tanto ajeno a toda la polémica, sorprendió con unas declaraciones muy optimistas: "Puede ser que esté mal de la cabeza o esté loco, pero todavía sigo pensando que vamos a ganar esta serie. Hemos cometidos algunos de los errores defensivos más estúpidos de todo el año", resumió tras el tercer partido ante Dallas. "Nos sucedió lo mismo que en el primer partido, lo controlamos pero en los minutos finales ellos lo hicieron mejor. A pesar de las derrotas, confiamos en que podemos ganar el siguiente partido y comenzar la remontada". El cuarto partido, definitivo si pierden los Lakers, se disputa el domingo por la noche, hora española, (21.00, Canal + Deportes) en Dallas.

Semifinal Conferencia Oeste. Grizzlies 101 -Thunder 93 (2-1)