Pendientes de Pedrosa

Dani Pedrosa no quiere darse por vencido. Aunque sus posibilidades de ganar el campeonato del mundo de motociclismo son remotas, ni quiere dar su brazo a torcer, ni quiere facilitar la faena al otro aspirante al título, Jorge Lorenzo, que a falta de cuatro carreras para que termine la temporada le saca 69 puntos de ventaja de los 100 que quedan en juego. El piloto de Honda, recién operado de la clavícula, pasó revisión médica en la clínica Dexeus de Barcelona. Y no ha decidido aún si incordiará un poquito más con su presencia al líder del mundial, o si retrasará su reaparición en aras de una mejor rehabilitación. Pero, a diferencia de las previsiones iniciales del equipo, que prácticamente descartaba su participación en el GP de Malaisia de este fin de semana, el propio piloto abrió la posibilidad de viajar a Sepang, donde Lorenzo necesitaría al menos siete puntos más que él para ganar el mundial.

Tras la revisión, Honda explicó que el objetivo es correr el GP de Australia, que se celebra inmediatamente después del de Malaisia. Si bien, Pedrosa dijo que existía una pequeña posibilidad de viajar a Sepang para la carrera de esta misma semana. "Tengo todavía el cuello demasiado rígido, y contracturada la espalda y la zona del hombro. Pero la revisión demuestra que la placa está realmente bien fijada a mi clavícula y mis progresos desde el día de la operación han sido muy buenos, sobre todo en los últimos dos días". Pedrosa empezó el lunes los ejercicios de rehabilitación pasiva con su fisioterapeuta. Todavía no puede mover el brazo por sí mismo, pero observa una gran mejoría con los masajes en la zona.

Segundo clasificado del mundial, fue intervenido de urgencia el sábado pasado de una múltiple fractura de la clavícula izquierda, lesión que se produjo durante la primera sesión de entrenamientos libres del viernes a consecuencia de una caída: según explicó Honda, el acelerador de su moto quedó enganchado y el piloto no pudo reducir velocidad a la entrada de una curva: al frenar, la máquina hizo un extraño y lo escupió sobre el asfalto. Se fracturó la clavícula en cuatro partes. Y en una intervención quirúrgica se la fijaron con una placa de titanio especial, de 8 orificios, y dos tornillos a compresión. Además, se hizo un esguince leve de tobillo. "Es una pena que esto haya ocurrido cuando estábamos en una racha tan buena de resultados. Simplemente, habrá que lidiar con ello", concluyó el piloto, que podría viajar mañana, perderse los primeros entrenamientos libres y subirse a la moto el sábado para la clasificación.

Aunque Lorenzo tiene el mundial asido por los cuernos, el hipotético regreso de Pedrosa le exigiría mejores resultados el domingo: debería sacarle una renta de siete puntos. Otros pilotos, como los españoles Álvaro Bautista o Álex Debón -hasta en dos ocasiones- se han fracturado la clavícula este mismo curso: Bautista fue operado el 15 de mayo y estuvo en Le Mans, una semana después: se fue al suelo en los libres, se hizo daño en la misma zona y regresó a casa. Debón, se la rompió por vez primer en Assen. Y corrió a la semana siguiente el GP de Catalunya: en carrera se vio envuelto en una caída y ni siquiera completó una vuelta. La segunda vez que se la fracturó fue en Indianapolis; no estuvo en Misano, a la semana siguiente, y regresó para el GP de Aragón, tres semanas después de producirse la lesión.