Messi quiere tomar el testigo de Maradona

Maradona vuelve a un mundial de fútbol. Será su quinto: estuvo como jugador en España 82, México 86, Italia 90 y EE UU 94. Y ahora, como seleccionador, llega a Sudáfrica con una misión: llevar a Argentina a lo más alto para que consiga su tercera Copa del Mundo. Y para hacerlo cuenta con el mejor jugador del mundo, Messi, su sucesor como el 10 de Argentina. En el camino del equipo sudamericano estarán Grecia, campeona de Europa en 2004, Nigeria y Corea del Sur.

Lionel Messi lo ha ganado todo con el Barcelona, pero nada con Argentina a nivel absoluto (sí que consiguió el Mundial Sub-20 en 2005). Ya participó en la Copa del Mundo de Alemania en 2006, donde tuvo minutos y goles, aunque no fue titular y Argentina cayó en cuartos frente a Alemania. Su rendimiento y el de su selección serán clave para situar a este jugador entre las leyendas históricas: el propio Maradona, Pelé...

Junto a Messi estarán Diego Milito, Higuaín, Agüero, Tévez, Mascherano, Verón o Di María, por nombrar a unos cuantos. Un plantel que, aunque en los últimos meses no ha desplegado un gran juego, salvo gran sorpresa, pasará primera de grupo sin complicaciones. ¿Quién quedará segunda de grupo? No está nada claro dado que las tres selecciones que acompañan a Argentina en el grupo B no llegan en su mejor momento.

Grecia ganó la Eurocopa de Portugal de 2004 con un juego rácano y ultradefensivo pero muy efectivo. Un estilo que no le sirvió para clasificarse para el Mundial de 2006 ni para defender el título europeo en 2008, cuando cayeron en el grupo de España. Siguen con el mismo seleccionador, el alemán Otto Rehhagel, y disputarán su segundo campeonato del mundo tras el de EE UU 94.

Nigeria, que cuenta entre sus estrellas con Kanu, Mikel y Uche, vivió tiempos mejores. En la categoría Sub-17 consiguió los Mundiales de 1985, 1993 y 2007, así como el torneo Olímpico de Fútbol en 1996. Sufrieron para clasificarse para este campeonato, pero su estado físico está un punto por encima de muchos de sus rivales. Si mantienen su defensa concentrada, tienen muchas posibilidades de pasar a octavos de final.

El Mundial de Sudáfrica será ya el octavo para Corea del Sur, cuyo mejor resultado, un cuarto puesto, fue en 2002, cuando fueron anfitriones. Hasta entonces siempre habían quedado entre los puestos 16 y 20. A su favor tienen la experiencia del delantero del Manchester United Park Ji-Sung y que sus rivales por el segundo puesto no llegan finos.