Van Gaal: "Mourinho siempre fue muy especial"

Hay algo paternal, estrambótico y honrado en Louis van Gaal. El entrenador del Bayern acudió a la sala de prensa del Bernabéu acompañando a Mark van Bommel y a Sebastian Schweinsteiger, como el patriarca de una tribu que lo sigue y lo respeta. Se sentó en la sala de prensa del Bernabéu para hablar de la final de la Liga de Campeones de mañana, contra el Inter, y cuando advirtió que las preguntas sobre Mourinho se repetían resolvió contar su primera experiencia con el entrenador portugués. Lo hizo con el rostro enrojecido, haciendo grandes aspavientos y emitiendo esos sonidos guturales, ásperos, como si su garganta fuera un tubo de papel de lija. La audiencia, con mayoría de bávaros, lombardos y españoles, se dobló de la risa.

"Cuando me llamó el Barcelona en 1997", comenzó el holandés; "me reuní con Núñez [el presidente], Bobby Robson [el entrenador] y José Mourinho [el ayudante de Robson] y me dijeron que yo iba a ser el entrenador. Fue una gran sorpresa. En principio me ocuparía de la cantera pero ahí me dieron la primicia de que en realidad entrenaría al primer equipo... Mourinho, que tampoco lo debía saber, estaba enfadadísimo. Furioso. ¡Gritaba!. Yo no sabía nada de él pero descubrí que ya entonces era the special one. Al verle tan furioso pensé que este hombre tenía algo. Precisamente por eso lo contraté. Esa era mi filosofía".

"Mourinho entonces tenía 35 años. Empezó haciendo los análisis del equipo y me hizo los informes de los rivales", recordó Van Gaal. "Ya entonces se veía que era muy bueno. Sabía mucho de fútbol. Era tan bueno que yo hice con él algo que no hago nunca: durante algunos partidos lo invité a que tomara decisiones tácticas. Y lo hizo muy bien. Luego decidió seguir conmigo de segundo, pudiéndose marchar a otros clubes. Creo que aprendió algunas cosas de mí, pero nunca imaginé que llegaría a convertirse en el entrenador que es hoy".

"No sabría decir qué aprendió de mí exactamente", reflexionó Van Gaal, "porque ahora no le veo entrenar. Solo sé que sabe de táctica porque sabe cómo resolver problemas durante los partidos y domina el arte de la persuasión porque es un maestro para convencer a los jugadores".

Van Gaal accedió a compararse con su discípulo. "Yo soy más atacante", dijo. "Quiero que mi equipo juegue en campo contrario. Mourinho cambia más. Solo piensa en el resultado. Mi filosofía es que hay que jugar para el público. Por eso tenemos que jugar también un fútbol atractivo".

Antes de que hablara su técnico, Van Bommel, el capitán del Bayern, dio su opinión de la final. "El partido se resolverá en los detalles", comentó. "En una falta, un saque de banda, minucias, en fin... Cualquier cosa puede decidir el resultado del juego. Si especulamos... Hombre, podemos especular sobre lo humano y lo divino. Solo lo que digamos en el partido tendrá valor".

"No podemos confundirnos con el Inter", avisó Van Bommel. "El Inter no es el equipo que jugó en el Camp Nou. Es un gran equipo con muchos registros. Sneijder es un futbolista muy ofensivo y saben apretar arriba.No siempre desprecian el balón y cuando lo tienen son muy eficaces".

El capitán del equipo bávaro dijo que no entiende por qué el Madrid vendió a Robben, un jugador esencial para ellos: "No sé por qué el Real Madrid no quiso a Robben. Pero es importantísimo para nosotros. Él sabe jugar para el equipo y nosotros sabemos jugar para él. Nos compenetramos muy bien y yo estoy encantado con él".