_
_
_
_
FÚTBOL | LIGA

El Atlético empata, que no es poco

Asenjo salva a los de Quique ante un Tenerife que mereció de sobra la victoria

Hablando en plata: el Atlético es un coñazo. Como "cosa insoportable" define el diccionario la palabra coñazo. Pues eso. Insoportable es el juego del Atlético. Gane, pierda, empate... Lo mismo da. Con Aguirre, con Abel, con Quique... Es igual. Cambian los técnicos pero, en todos los casos, quienes se mantienen en la foto son los directivos, los Gil, Cerezo... Y los ideólogos (Pitarch...). Y los aficionados, tan aficionados, tan fieles, capaces un centenar de ellos de viajar a Tenerife para ser testigos de un nuevo ejercicio de impotencia del equipo, ¿o será del club?, con sus dimes y diretes, por no decir con sus miserias, los mejores porque sí que dice el himno, qué grandes somos y qué pequeños parecemos. Ha entrado el Atlético en estado de pánico y lo mismo da si viaja a Tenerife, a Londres o a Nicosia. No hay rival pequeño para tan pequeño equipo.

TENERIFE 1 - ATLÉTICO 1

CD Tenerife: Sergio Aragoneses; Juanlu, Manolo Martínez (Culebras, min. 26), Pablo Sicilia, Bellvís; Ricardo, Mikel Alonso; Kome (Román Martínez, min. 88), Alfaro, Ayoze (Ángel, min. 77); y Nino.

Atlético de Madrid: Asenjo; Ujfalusi, Perea (Pablo, min. 85), Juanito, Domínguez; Maxi Rodríguez (Raúl García, min. 70), Assuncao, Cleber Santana, Simao; Jurado (Sinama Pongolle, min. 80) y Forlán.

Goles: 1-0. Min. 2: Nino, en el segundo palo empujó un pase de Alfaro. 1-1. Min. 21: Jurado, de duro disparo ante Aragoneses.

Árbitro: Alfonso Pérez Burrull (Comité Cántabro). Amonestó al jugador local Ricardo, y a los visitantes Jurado, Juanito, Maxi, Domínguez y Ujfalusi

Incidencias: Encuentro disputado en el Heliodoro Rodríguez López ante unos 21.414 espectadores, correspondiente a la jornada 15 de Primera división. La taekwondista palmera Rosana Simón, campeona del Mundo de la especialidad, realizó el saque de honor. Además, se guardó un minuto de silencio por la reciente muerte de Manuel Jorge, ex jugador local.

Más información
"La culpa la tenía Abel, ¿no?"

Acostumbrado estaba Asenjo a verse exigido, no en vano jugaba en el Valladolid, y en el Atlético desembarcó pensando, quizá, que viviría más tranquilo siendo como es el rojiblanco un equipo histórico. Un equipo histérico es lo que se ha encontrado. Ahí estaba el chico en el minuto 89 saliendo al borde del área para despejar de cabeza un envío largo que buscaba a Nino, protegiendo así el paupérrimo empate que el Atlético cazaba en la isla, un resultado infame a priori pero magnífico si se tiene en cuenta cómo transcurrió el partido, cómo perdonó el Tenerife la vida al Atlético, a este Atlético que es un puro disparate. Y ahí estaba el portero rojiblanco en el minuto 93 para rechazar la chilena del inefable Nino, amén de sacar su posterior remate. Nunca ganó Nino una Bota de Oro, y dos ha ganado Forlán. Y resulta que está aquél mejor acompañado que éste, mucho más cuando el uruguayo no ve a su vera al lesionado Agüero, un chico que ayer se perdió su cuarto partido de los últimos 129 que ha disputado el equipo en la Liga. Y, sin él, jamás ganó el Atlético.

Tampoco ayer. Y bastante que empató, gran éxito para un equipo que no está muerto aunque presente un aspecto amortajado. Tiene el Atlético a Assunção y Cleber en la zona de creación y tiene el Tenerife a Mikel Alonso, que no es su hermano Xabi pero algún gen conserva. Movió Mikel a su equipo con criterio, por mucho que de cuando en vez se precipitara, y el Tenerife echó a volar. Tanto voló que a los dos minutos logró su gol, firmado por Nino en el segundo palo tras un centro desde la derecha que prolongó con habilidad Alfaro. Corrió riesgos el Tenerife al adelantar su defensa y de ello se aprovechó su rival, que logró el empate en una carrera insustancial de Cleber a la que Forlán dio coherencia, dejando a Jurado solo ante el portero, al que fusiló.

A partir de ahí el partido fue del Tenerife, que apretó con todo, incluso con sus carencias, y que se encontró con un penalti a favor por una supuesta mano de Domínguez, que Nino lanzó para que Asenjo se luciera. Porque se lució Asenjo, en esa jugada, en las anteriores, en las posteriores, en el tramo final, culpable como fue de que el Atlético conservara el empate, magnífico botín que le sitúa a dos puntos del descenso, de ese infierno del que el equipo lucha por escapar. Aunque no lo parezca

El técnico rojiblanco da órdenes a Jurado, autor del gol atlético ante el Tenerife
El técnico rojiblanco da órdenes a Jurado, autor del gol atlético ante el TenerifeEFE

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_