Dani García, cocina fácil de la mano de un tres estrellas Michelín
El chef toma el lunes 4 de marzo en La 1 con su ‘Hacer de comer’ el relevo de los hermanos Torres
Dani García no es un solo chef; se multiplica con abundantes proyectos. “Cocineros hay tantos como personas, pero yo siempre me he sentido más que uno de alta cocina y por ello he ido tomando diferentes decisiones en mi carrera profesional“, comenta a EL PAÍS. Han sido determinaciones como dedicarse al mundo de la tapa, crear menús para McDonald's, poner en marcha tabernas asequibles o cerrar (el próximo mes de octubre), el restaurante que lleva su nombre en Marbella un mes después de lograr la tercera estrella Michelín para reconvertirlo en un steak house. Decisiones tan meditadas como su nueva aventura: ponerse al frente de un programa diario de cocina tradicional en la televisión pública.
La 1 estrenará el lunes 4 de marzo (13.25) Hacer de comer, espacio con el que García toma el relevo de Torres en la cocina después de cuatro temporadas con los chefs Sergio y Javier Torres. Y lo hace con un espíritu parecido: acercar la cocina tradicional al espectador con un ligero toque moderno. “Dentro de todas estas decisiones, una de ellas es acercarme a un público ávido de hacer cosas supertradicionales y que sean reconocibles y fáciles de encontrar en un supermercado”, dice el cocinero en la trastienda del plató de MasterChef, donde ha acudido como invitado a la grabación de uno de los episodios de la próxima entrega. “Esos Dani García que puedo llegar a ser como cocinero, son padre también. Uno que vive con su hija y que en muchas ocasiones tiene que hacer un caldo de puchero o una comida en 15 minutos. En este sentido, no tengo los recursos que en un restaurante, tengo los mismos que todo el mundo tiene en su casa”, afirma.
“En el mundo de la cocina hay muchas cosas que mucha gente todavía no sabe. Me encantaría transmitir un poco de cocina puramente tradicional, explicando sobre todo trucos y dándole ese toque que lo haga diferente, no a nivel de producto ni de cosas extrañas, sino en cocciones y técnicas, sin acudir a la alta cocina para nada sino todo lo contrario”, explica el chef. El programa, producido por Shine Iberia, se emitirá de lunes a viernes y cada entrega durará menos de media hora. García contará como pinche con Antonio Romero, exconcursante de MasterChef 3.
¿Qué cocinará en pantalla? “De todo. Te puedes encontrar desde una ensalada de quinoa a unas albóndigas con tomate, un rodaballo al horno, una lasaña, una pasta…”. Y habrá hamburguesas también, dice, en alusión a la información que salió cuando anunció que su restaurante se reconvertirá en un steak house y muchos entendieron que iba a ser solo una hamburguesería. “Soy hipermegafan de la hamburguesa, pero es un steak house. Será todo lo especial que podamos hacer que sea. Al final se trata de que todo lo que hagamos sea lo más goloso y rico posible. En este caso, que sí, que habrá hamburguesas, intentaremos que haya una carne genial, un pan genial, una salsa genial…”, apunta.
“Queremos que sea fresco, dinámico, que la gente participe, siempre va a haber alguien conmigo, algún invitado conocido, algún otro simplemente que nos ven y que tienen un problema en su casa y que se lo vamos a solucionar, vendrá gente de mi equipo. Intentaremos que sea muy didáctico, pero que no se salga dentro de la realidad que vive la gente en sus casas en una cocina y no pretender utilizar ingredientes que los pobres se van a comer la cabeza que tengan que comprar en Alemania a través de una página web, todo lo contrario”, explica. Entre los invitados estarán otros chefs como Ramón Freixa, Ángel León y Marcos Morán, famosos como María Esteve, Fernando Romay y Jorge Blass o el trío de jueces de MasterChef, Samantha Vallejo-Nágera, Jordi Cruz y Pepe Rodríguez.
García tiene poca experiencia en televisión. La que le ha dado principalmente ser invitado en numerosas ocasiones en las diferentes ediciones de MasterChef, de la misma productora. “Intento no reflexionar ni pensar en ello. Al final, la cocina es mi vida y siempre estaré en el programa rodeado de gente. Para mí, se trata de explicar las cosas tal y como las puedo explicar en un congreso o en una entrevista, no va más allá. No quiero pensar en que hay una cámara y miles de espectadores detrás que te analizan absolutamente todo. Soy normal, natural e intentaré ser el mismo que soy siempre con o sin cámaras”, apunta. “MasterChef es un sitio que atrae, la considero mi casa y al final me considero parte del equipo. Al final, el programa diario va de la mano y me considero como de la casa”, remata.
“Quiero hacer un programa para gente que está en su casa, y no me perturba hacer unas albóndigas con tomate después de haber hecho millones de platos de alta cocina. Me apetece crear conceptos más baratos incluso de los que tengo, me apetece ir a otro tipo de público. Ya no es solo una cuestión económica o una estrategia financiera, es una cuestión de que uno es lo que siente y le apetece hacer en un momento de su vida”, finaliza Dani García.
Una nevera normal
¿Qué tiene Dani García en la cocina de su casa? ¿Productos como los pueda tener el espectador al que se dirige? “Tengo cosas normales, soy un tío normal. Jamón de york, pavo, fiambre vamos, queso, mozzarrella suelo tener, siempre verdura, tomates, espárragos verdes, champiñones, algo de pasta fresca, nata líquida, beicon. Fruta también. Carne y pescado sí compro al día. Pasta, arroces, cosas normales. Por eso creo que puedo aportar un montón en ese ámbito y despojarme un poco de la camiseta del mundo de la alta cocina y ponerme la camiseta de una persona normal que cocina en su casa cosas para su hija o para su madre y para su familia cuando viene”, responde.
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