Parques temáticos
A propósito de la versión española de 'Intercambio consentido', sorprende que nadie haya concebido algo más original, por ejemplo un parque temático con especies en vías de extinción


A propósito de la versión española de Intercambio consentido, sorprende que nadie haya concebido algo más original, por ejemplo un parque temático con especies en vías de extinción: parejas con más de un cuarto de siglo de vida en común. Las visitas de los colegios serían gratis y con apuntador. Mirad chavales, aquella que se ríe y pasea de la mano, lleva junta cuarenta y pico años. ¿A que parece mentira?
El parque estrenado esta semana por Antena 3, una adaptación del australiano Seven Year Switch, es convencional y rutinario. El emparejamiento a palos no es tan original como lo sería descodificar las claves de las convivencias eternas.
Las especies exhibidas en Intercambio consentido abundan y se reproducen aceleradamente. Son ocho parejas con problemas que se intercambian con desconocidos como si fueran su pareja real. Comparten todo durante dos semanas, incluido el baño y la cama, aunque sin activarla como tálamo.
Los conflictos a resolver son los de siempre, con la intolerancia como el origen de casi todos. Su escenificación resulta artificiosa, aunque los ronquidos de un cónyuge sí parecían reales. Como no hay muchas novedades argumentales, cabría esperar espectáculo, pero tampoco.
A ratos, el reality entretiene con rispideces de andar por casa, similares a las de series de otros países que han abordado los desencuentros por activa y por pasiva. Nueva vuelta al calcetín en España.
Un psiquiatra y una consejera sentimental analizan las causas de las desavenencias y la piedra filosofal del éxito, que se sustentaría en tres pilares: una buena comunicación, una vida sexual saludable y un proyecto común. Tarea de titanes, a juzgar por la avalancha de separaciones, divorcios y colas en los juzgados.
Emocionaría más escrutar las prácticas de parejas longevas con los tres apoyos de sustentación fragmentados, aguantando tralla heroicamente, sin intercambios raros. Los colegiales de visita al parque entenderían el porqué de la filosofía como asignatura, la utilidad doméstica de la ontología y la santidad.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Un ataque masivo ruso deja sin electricidad un tercio de Kiev en vísperas de la reunión entre Trump y Zelenski
El Govern abrirá cuatro oficinas de atención ciudadana en 2026 y otras cinco móviles
El temporal sigue activo en Cataluña y pone al límite el caudal de los ríos en Girona
Desaparecidos cuatro miembros de una familia española en un naufragio en Indonesia
Lo más visto
- Acuerdo en Villamanín por el Gordo sin repartir: la comisión de fiestas cede más de dos millones por la paz del pueblo
- Junqueras avisa de que la recaudación del IRPF es “imprescindible” para negociar los presupuestos de Sánchez e Illa
- Maisa Hens, cantante: “Gracias al anuncio de El Almendro no tuve que volver a hacer un ‘casting”
- Timothy Morton, activista: “Estados Unidos es un gigantesco campo de concentración”
- El PP de Ayuso veta la comisión de investigación que pidió Más Madrid para el hospital de Torrejón




























































