Tamzin Townsend: “Le daría el Premio Nobel a Shakespeare”

Con más de 40 montajes a sus espaldas, Tamzin Townsend (Liverpool, 1969) estrena la comedia Héroes, sobre veteranos de guerra, en el teatro Reina Victoria.

—¿Cómo entró en el teatro?

—Mi madre era actriz; mi padre, escritor… Mi madre me llevaba a ver todos los montajes de Shakespeare. El teatro en mi vida no ha sido una elección.

—¿Un director (o directora) teatral tiene que ser como un general con sus actores?

—Qué va. Tiene que tener muy claro lo que quiere, poner guías, dejar las líneas muy claras. Además, debe trabajar mucho el personaje y dar libertad al actor.

—¿Quiénes son sus héroes particulares?

—Mi madre es mi heroína. Fue madre soltera en los setenta y me llevó hacia todo lo que pongo en uso ahora.

—¿Y cuál es su guerra? ¿Se siente veterana de alguna?

—Tengo la guerra declarada al cansancio. Busco levantarme cada mañana positiva y feliz, y no hacer mil cosas a la vez pretendiendo que todo salga bien. Y sí me siento muy veterana en el mundo del teatro. He dirigido muchas obras. La pega es que he pasado de ser pardilla a veterana sin pasar por los pasos centrales.

—¿Cuál es el último libro que ha leído y le ha gustado?

—Lord Lucan, basado en la misteriosa desaparición del conde de Lucan tras el asesinato de la niñera de sus hijos. Me fascina el crimen real. No como algo gore o morboso. Cuando tuve que elegir carrera opté por teatro, pero me fascina la criminología.

—¿Y la última película?

—Paso mi vida en los aviones y veo decenas de películas. No recuerdo la última. En Virgin Airlines tienen unos buenos documentales. El que más me ha gustado ha sido The Lady At Number 6, ganador del Oscar al mejor documental en 2014, sobre la pianista más anciana del mundo y superviviente del Holocausto.

—¿Qué canción escogería co­mo autorretrato?

—No puedo escoger porque creo que el ser humano está cambiando constantemente.

—¿Cuál es el suceso histórico que más admira?

—El final de la guerra civil de América, la liberación de esclavos. El voto para la mujer, la libertad de la mujer, la voz de la mujer…

—¿Qué encargo no aceptaría jamás?

—Una obra con un mensaje que perjudique a la mujer.

—¿A qué actor le daría un Oscar? ¿Y a qué dramaturgo el Premio Nobel?

—El Oscar, a algunos actores secundarios como Ken Stott o Hugh Bonneville. Y el Nobel, a Shakespeare, a Tennessee Williams o a Alan Ayckbourn.