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ENTREVISTA A SIGOURNEY WEAVER

“Mi altura me salva de interpretar papeles convencionales”

La actriz es la protagonista de la nueva serie que emite canal +, 'Political animals'

La actriz Sigourney Weaver en una escena de la serie 'Political animals'
La actriz Sigourney Weaver en una escena de la serie 'Political animals'Cordon Press

Ya sea luchando contra aliens o defendiendo a su familia en el seno de la Casa Blanca, pocas como Sigourney Weaver saben enseñar las uñas con tal fiereza y con tanta humanidad. La actriz neoyorquina de 63 años ha sabido durante años distanciarse de lo que significa ser actriz en Hollywood escogiendo los papeles más excepcionales del medio, incluido ahora su debut en el mundo de la televisión como protagonista de la serie Political animals (jueves a las 21.30 en Canal + 1). En ella la coprotagonista de Avatar interpreta quizá a una de las mujeres más poderosas del mundo, primera dama avergonzada públicamente por su marido, ninguneada en su intento a la presidencia y valiosa secretaria de Estado. ¿Hillary Clinton? Weaver dice que no aunque sonríe cómplice mientras responde.

Pregunta. Es imposible dejar de pensar en Hillary Clinton cuando uno ve Political animals.

Respuesta. No fue esa la idea. Lo que me interesó del trabajo de Greg Berlanti es que se inspira no solo en los Clinton o en los Kennedy sino en cualquier otra familia poderosa y el efecto de esa ambición en los diferentes miembros del clan. Porque serás la mujer más poderosa del mundo pero en el salón de tu casa, en tu cocina, no eres más que otra madre lidiando con sus hijos.

P. Esta es la segunda vez que interpreta el papel de una primera dama. ¿Para cuándo una mujer presidenta?

Esta es la segunda vez que interpreta el papel de una primera dama

R. Lo damos por hecho pero obviamente no es tan fácil. Soy de las que piensa que las mujeres traen una energía completamente diferente a la mesa. Su liderazgo no es un gesto, no se trata de un quién la tiene más grande, disculpa la expresión. Es una estrategia más práctica que busca el consenso. Está en nuestro ADN. Es otro tipo de energía. Las mujeres tienden a preservar la especie y acabar las cosas que empiezan, algo que se verá también en la política.

P. ¿Y en el ADN de la industria de Hollywood? ¿Se dan los mismos patrones?

R. Charlize Theron es el mejor ejemplo de lo que significa ser mujer y tener poder en Hollywood. Alguien inteligente, interesante, guapa. Y por desgracia sin que existan suficientes papeles que reflejen todo su talento. Por eso tiene que generarlos. O buscarlos en otros formatos como me pasa ahora en el campo de la televisión.

P. La admiración es mutua porque su nombre siempre está en los labios de Theron como el ejemplo de la carrera que le gustaría seguir.

“Trabajé con un congresista a favor del control de las armas”

R. He tenido suerte y, curiosamente, la altura (la actriz mide 1,82 metros) ha jugado a mi favor. Una extraña bendición que en principio fue un hándicap porque en cuanto llegaba a un reparto veías cómo la estrella se sentaba para que no se notara que le sacaba una cabeza. Muchos de nuestros galanes son… ¿bajos? Pero mi altura me salva de interpretar papeles convencionales y me permite ser una mujer como Ripley (Alien), como Dian Fossey (Gorilas en la niebla), como Elaine, y no la pareja de alguien.

P. ¿Cómo ha sido su salto a la televisión?

R. Estuvo bien aunque tengo que reconocer que cuando me ofrecieron este papel no estaba buscando nada en este medio. Tengo pendiente el rodaje de Avatar 2 y 3. Pero se trata de una mujer tan interesante. Como comerte un buen filete después de años de ser vegetariana. Delicioso. Lo cierto es que soy de la vieja escuela y lo que me gusta es el teatro, pero si me preguntas qué me ha gustado últimamente te menciono trabajos televisivos como Breaking bad. Una maravilla. Y me alegro de esta revolución después de que mi padre fuera uno de los pioneros del medio. Pero también espero que la televisión sirva de inspiración al cine para que muestre esas otras temáticas que hace años no vemos. Que no podemos estar viendo películas de acción y superhéroes todos los días.

P. ¿Se considera un animal político?

R. Trabajé con un congresista cuando estaba en la universidad a favor del control de las armas. Fue un tiempo interesante y me volvió algo más cínica. Siempre voto demócrata pero porque coincido con sus ideas, no por el culto a una persona.

P. ¿Cómo Hillary Clinton? ¿Votaría por una Hillary presidente?

R. Es una mujer a la que admiro aunque no he tenido la oportunidad de conocer. Ya tiene bastante con su trabajo como para que le vengan diciendo que hago de ella en la serie. Estoy segura de que un día coincidiremos en alguna gala y nos intercambiaremos una sonrisa cómplice porque nadie mejor que ella para saber que Elaine no está inspirada en su persona. Por lo demás, no es nuevo que soy una gran defensora del gobierno de Obama y que espero que Hillary sea nuestra próxima presidenta.

P. Y si tenemos que creerla y Elaine no es Hillary Clinton, ¿en quién se ha inspirado para dar forma a Political animals?

R. De algún modo admiro y me sirven de inspiración filántropos y benefactores que desde el sector privado están en contacto con las áreas de poder. Gente con la misma rectitud moral de Elaine. En concreto, y aunque sea curioso, dos hombres como Michael Posner, el que fue presidente de Human Rights First, o el escritor infantil Arthur Yorinks. Pero en Elaine también hay algo de todas esas grandes mujeres con las que crecí en televisión, no solo Lucille Ball o Mary Tyler Moore sino My Little Margie, The Loretta Young Show o I married Joan. Incluso Sheena Queen of the Jungle. Heroínas cómicas si quieres pero que desde la televisión tuvieron en mí un mayor impacto que cualquier otra cosa que vi en el cine.

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