Remate: "Me preocupa que me guste 'Say you, say me' de Lionel Richie
Fernando Martínez, alias Remate, acaba de publicar Superluv, por lo que tiene de romántico, un disco totalmente pop y parcialmente conceptual (o viceversa) que gira alrededor de actrices porno cuyo apellido es Luv, al parecer tan común en el mundo del Cine X como Smith en el real. El cantautor madrileño de 36 años, al que el famoso semanal británico NME comparó en 2007 con Sufjan Stevens, ha grabado su quinto disco en Nueva York con LD Beghtol un cercano colaborador de Stephin Merritt, líder de los míticos Magnetic Fields, como productor. Mañana (el sábado 30 de abril) lo presenta en la sala Moby Dick, acompañado por Luis Brea, otro inclasificable autor local.
El primer disco que compraste
Exactamente no lo sé, pero recuerdo que a los 18 años me compré una cassette doble de Los Lobos que me fascinó, y la perdí, y luego buscando nunca he sabido ni cuál era ni he dado con un disco suyo que me gustara tanto.
La primera letra que aprendiste de memoria
Me sé muy pocas letras, la verdad. Creo que Hey Hey, My My (Into the Black), de Neil Young más que nada porque era muy fácil.
La canción que odias que te guste
No odio que me guste, pero me preocupa: Say you Say me, de Lionel Richie.
La canción que te encantaría que te gustase, pero no puedes
Casi cualquiera de ABBA. Me gusta todo de ellas y de ellos menos las canciones.
La mejor canción para un karaoke
(What's So Funny 'Bout) Peace Love and Understanding de Elvis Costello, claro que muy empujado por la interpretación de Bill Murray en Lost In Translation. Hace un tiempo yo probé a dúo con Amaia, de Kokoshca, Soy rebelde, de Jeanette y creo que quedó un poco cazafantasmas.
La última canción que te ha impresionado.
La única que he escuchado del nuevo disco de Cass McCombs, me pareció impresionante.
La canción que te hace bailar irremediablemente.
Wicked World, de Daniel Johnston. Como si derrapara montado en una tabla de surf imaginaria por los charcos de una ciudad sucia.
La canción que te hace llorar
Es todo un pack lacrimógeno de telefilme: esa canción de Neil Young que sale en la película Philadelphia, cuando el vídeo de la infancia de Tom Hanks. Terrible (lo mío).
La mejor canción para un mal día
Where Does All The Money Go, de East River Pipe. Me pone en armonía con el reino animal.
La canción para decirle a alguien que necesitas ayuda
Una de Slayer elegida al azar.
La canción más violenta del mundo
La canción que más detestas del mundo.
Cualquiera de Oasis. Urticaria.
El dueto que te gustaría hacer
Con alguna tía indescriptible. Grace Jones, por ejemplo. Yo quedaría como un dibujo animado.
Un tema para mandarlo todo al cuerno cualquier mañana de miércoles
Sometimes a Pony Gets Depressed de Silver Jews. Al poner a un pony en el diván ya puedes con todos tus monstruos, ¿no?
Esa música que te ayudó a olvidar a esa mujer...
Ninguna, pero Talking Dogs, de Robert Pollard hace que me olvide de muchas cosas.
La canción que llevas siempre contigo, por si acaso.
The Beast In Me, de Nick Lowe. Sirve para la bella y para la bestia.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.