Rocío Jurado entra en un coma "más profundo"

El médico personal de Rocío Jurado, Alejandro Domingo, que ha permanecido por primera vez toda la noche en la casa de la cantante en Madrid, ha señalado esta mañana a los periodistas: "Podemos hablar ahora de un coma más profundo, pero los detalles técnicos no los puedo dar". "A medida que pasan los días, los ánimos de la familia van decayendo", ha añadido el doctor Domingo al abandonar el domicilio. Por la tarde, su hermano, Amador Mohedano, ha confirmado que "no hay ninguna mejoría ni ningún paso atrás" en el estado de la cantante, que "sigue en coma".

En una breve declaración a los medios esta mañana al salir de la casa de Jurado, Alejandro Domingo ha añadido que "después de ayer por la tarde, en que sufrió un empeoramiento, a las diez o las doce de la noche se estabilizó la situación". El doctor Domingo ha permanecido toda la noche en el domicilio de la cantante, un chalé conocido como Villa Rocío en la zona residencial de La Moraleja (Madrid). Ésta es la primera ocasión en la que el facultativo decide pernoctar en la casa de la estrella desde que el pasado viernes le sobrevino una grave crisis hepática que la ha sumido en episodios de inconsciencia.

De momento, el médico de la cantante no ha ofrecido más datos sobre su estado, pero Amador Mohedano, hermano de Rocío Jurado, y su esposa, Rosa Benito, han confirmado esta tarde que "no hay ninguna mejoría ni ningún paso atrás" en el estado de la cantante, que "sigue en coma" y no responde a ningún estímulo. La familia está "destrozada" y permanentemente al lado de la artista. El hermano y mánager de la cantante y su esposa han hecho estas declaraciones cuando salían de la residencia de Rocío Jurado y han sido preguntados por los numerosos periodistas que allí esperan noticias sobre la evolución del estado de la cantante, a quienes han pedido "respeto" por el "dolor" que está viviendo la familia.

Al Rocío, en silencio

Para el marido de la cantante, el torero José Ortega Cano, "es difícil, muy difícil, sobrellevar esta situación", si bien "en ningún momento ha necesitado ayuda médica", según manifestó ayer Eugenio Cano, hermano del diestro, tras visitar a la tonadillera, juntamente con su otra hermana, Concha. "No ha habido ningún cambio. Abre los ojos a veces, pero, la verdad, es que nos sabemos si nos ve o no nos ve", explicó Eugenio Cano. "Son muchos meses", añadió, en referencia al tiempo que la familia lleva enfrentándose a esta situación desde que a finales de enero la chipionera fue tratada en Houston (EE UU), luego en la clínica madrileña Montepríncipe y después fuera llevada a su domicilio de La Moraleja, a causa del agravamiento del cáncer de páncreas que padece.

El secretario personal de Rocío Jurado, Juan Rosa de la Rosa, abandonó anoche el chalé sin querer hablar y sólo hizo el gesto de llevarse la mano a la cara, como muestra de dolor y tristeza. Varios familiares de la cantante abandonaron Villa Jurado a las 1.30 horas en un automóvil con matrícula de Cádiz, y una hora después un sobrino de la tonadillera que accedió a bajar el cristal de la ventanilla de su coche dijo, con voz angustiada y poco audible, que su tía Rocío está "muy malita".

Mientras tanto, todo el pueblo de Chipiona (Cádiz), donde nació la artista el 18 de septiembre de 1944, se encuentra pendiente y preocupado por su estado de salud. A su casa familiar se han acercado ya numerosas personas para escribir en sus paredes mensajes de aliento y apoyo para ella y su familia en estos momentos dolorosos. La hermandad de Chipiona, que ha salido hoy para el Rocío, lo ha hecho en silencio en señal de respeto a la artista.