_
_
_
_
PASARELA CIBELES

Amaya Arzuaga convence en su regreso a la cita madrileña con la moda

Francis Montesinos vuelve a ofrecer un amplio abanico de propuestas y tendencias

El Self Service, colección con la que Amaya Arzuaga ha regresado a la Pasarela Cibeles después de ocho años de ausencia y con la que celebra su décimo aniversario en el mundo de la moda, ha convencido a los numerosos seguidores de la diseñadora burgalesa que esperaban su retorno. Este desfile se ha convertido en uno de los "platos fuertes" de Cibeles y ha sido de los más concurridos, con las gradas completamente llenas, algo que ni siquiera ha logrado Francis Montesinos, que ha inaugurado esta tercera jornada.

Más información
Duyos halla una sólida inspiración étnica en el México de Frida Kahlo

Un mismo volumen, que aparece tanto en las caderas de las faldas, como en los hombros de las chaquetas o en las perneras de los pantalones, es el hilo conductor de una colección que Arzuaga se ha planteado como una "destructuración" y superposición de prendas y en la que han destacado las faldas tipo globo, los frunces que se ajustan a la figura o que se disparan completamente de ella. Arzuaga apuesta por el largo total en perfectos abrigos y por anchas mangas farol que vuelven, después de varios años, a aumentar la anchura de los hombros femeninos. La paleta de colores va del blanco al negro, pasando por los naranjas, rojos y morados. Tampoco ha decepcionado la siempre delicada Julie Sohn con unas prendas elegantes, pulcras, dulces y románticas.

Con bajos asimétricos, abullonados y de aires cosacos las faldas son largas y envolventes, los pantalones amplios y los jerséis de fino cashmere, calados y con efectos de encaje. El gris ha tenido protagonismo especial, como en los vestidos largos en los combina delicados puntos con tafetan, junto con el marrón chocolate, negros y berenjena. Para subir el tono, pinceladas de verde limón. También se han lanzado propuestas de estilo sastre en pata de gallo en blanco y negro o en raya diplomática. La "ausencia y el vacío que provoca la necesidad de cubrir un estado emocional situado a las puertas del deseo y el sexo" es Loveless, colección con la que la joven pareja que forma Locking Shocking ha vuelto a arriesgarse.

El menos no es más para Kina Fernández

Dos grandes pantallas para mostrar el recorrido en solitario de Oscar y Ana por la ciudad hasta llegar al punto que les une, y desde el que comienzan unas propuestas de clara inspiración futurista. Con unas primeras salidas sensuales y provocativas, con ajustados monos metalizados en oro, plata y cobre, la colección ha evolucionado hacia una línea sport de tejidos rígidos usados para dar volúmenes a las perneras de los pantalones, y ha acabado con una fiesta en la que la mujer viste también monos, pero de grandes volúmenes, en mangas y piernas, y con vestidos y trajes tipo smoking. Y para enfrentarse al frío un abrigo tipo edredón de seda. La colección masculina, muy dandy, sigue la misma línea y en ella destacan los trajes de seda y los de príncipe de gales en marrón.

Dedicada a la mujer, a todo tipo de mujer, la colección del valenciano Francis Montesinos ha vuelto a ser un amplio abanico de propuestas y tendencias, desde la parte más vaquera y sport hasta la novia, en este caso dos novias de insinuante ambigüedad. Puntos, estampados, volantes, flecos, mantillas, brillantes colores, combinaciones imposibles, es decir, todo el amplio abanico que forma ese imaginativo mundo Montesinos, formado por un pupurri de tendencias en prendas muy bien hechas. En un escenario completamente diferente, Andrés Sardá ha mostrado de nuevo su buen gusto y maestría en una corsetería que llegó al máximo de la sofisticación, aunque con un toque un poquito burdel decadente, y cuya presentación ha girado en torno a una lujosa tela de araña.

Las medias, adornadas con volantes o pedrerías, se sitúan en los muslos, y los sujetadores, tops, bóxer, tangas o coulotes se convierten en auténticas joyas de raso, tul, encaje o bambula en ocasiones bordadas o iluminadas con cristales de Swarovski. La gallega Kina Fernández afirma haberse inspirado "en las campañas napoleónicas en Europa del Este" para hacer una colección que divide en una primera parte más sobria compuesta por vestimentas de tipo militar, con grandes cuellos, abrigos cruzados con grandes botonaduras y estrechos pantalones metidos por las botas. La otra parte de la colección es más femenina, con lanas compactas, estampados florales de terciopelo, numerosos detalles en piel, faldas formadas por varias capas de diversas texturas y trajes de príncipe de gales, para llegar a una noche de largos vestidos llenos de bordados. Para Kina, el menos no es más.

Pantalón y jersey en color crudo, ambas prendas con vuelo añadido, diseño de la colección de Amaya Arzuaga.
Pantalón y jersey en color crudo, ambas prendas con vuelo añadido, diseño de la colección de Amaya Arzuaga.EFE
Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_